La carretera Villa Tunari - San Ignacio de Moxos, con el nombre “Carretera de integración Cochabamba-Beni”, es un engaño, si se analiza las condiciones técnicas, jurídicas y económicas con las que el Gobierno contrató a la constructora brasileña OAS.
En la construcción de la carretera Villa Tunari - San Ignacio de Moxos da la impresión que el Gobierno está apostando su prestigio y credibilidad, ofreciendo prosperidad al pueblo beniano de Moxos y sus alrededores, lo cual no es factible, porque dicha vía no reúne las condiciones básicas para generar desarrollo económico, social y comercial.
Si la carretera se construye cruzando el Parque Nacional Isiboro Sécure significará decepción, angustia, muerte y desaparición de los pueblos indígenas Mojeño, Yuracaré y Chimán, debido a la apropiación ilegal de sus tierras, junto a sus viviendas, promovida por los cocaleros del Chapare (CONISUR), quienes serán culpables de la depredación de los recursos naturales, de cambios en el ciclo hidrológico por variantes en la climatología, que afectarán a los ecosistemas terrestres y acuáticos.
El presidente Evo Morales parece que no se da cuenta del sufrimiento y penurias de los indígenas del TIPNIS, que sólo piden que no se construya la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos cruzando el Parque de Reserva Nacional Isiboro Sécure.
Por noticias de prensa se conoce que el Gobierno acepta todo lo que le piden los que marchan a La Paz utilizando dinamita para causar destrozos en bienes del Estado y molestar a los ciudadanos. Pero no ocurre lo mismo con los marchistas indígenas que arriesgan la vida para llegar a La Paz, demandando que sean respetados sus derechos como naciones autónomas, conforme a disposiciones del Estado plurinacional.
Por el contrario, las autoridades gubernamentales responden inadecuadamente con la fuerza policial a fin de impedir que prosiga la marcha de los indígenas del TIPNIS, desconociendo que el Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro-Sécure es un área protegida de Bolivia, creada mediante DS 7.401 de 22 de noviembre de 1990.
El presidente Morales debe darse cuenta de que es otro error insinuar que la carretera Villa Tunari - San Ignacio de Moxos por sí misma generaría el desarrollo económico y social en Cochabamba y Beni, sabiendo que el desarrollo económico entre dos pueblos se debe al comercio, a la venta y compra de los productos que producen y que la parte social es íntegramente obligación del Estado.
Como información de la hidrografía relacionada con el territorio indígena, el Parque Isiboro Sécure y el río Mamoré, se puede decir que el TIPNIS está ubicado entre los departamentos del Beni (provincia de Moxos) y Cochabamba (provincia del Chapare). Los ríos Sécure e Isiboro están ubicados respectivamente al norte y al sur del TIPNIS y los dos son navegables. El río Ichoa, afluente del Isiboro, atraviesa el TIPNIS por su parte central y el río Mamoré tiene una longitud real de 1.319 Km. desde su nacimiento hasta la unión con el río Beni.
Según estos datos, se puede deducir que la carretera Villa Tunari técnica y económicamente no es conveniente y menos recomendable, por lo que insistir en su construcción sólo originará más perjuicios que beneficios al país.
Por lo tanto, al presidente Morales muchos bolivianos le sugerimos que no se desgaste protegiendo a los grupos cocaleros de poder económico que causarán grandes daños al país y, por el contrario, que el Gobierno acepte la vigencia del Decreto 180, aprobado por la Asamblea Constituyente y firmado por el Jefe de Estado. Al mismo tiempo es necesario derogar la Ley 222 de “Consulta previa”, considerada inconstitucional.
El autor es Ing. Civil – Militar, Ing. Ambientalista Certificado y ex miembro del BID.
anbazqui@entelnet.bo
Usurpado el 7 de octubre de 1970, por defender EL DIARIO |
Dirección:
Antonio Carrasco Guzmán
Jorge Carrasco Guzmán Consejo de Administración:
Miguel Lazo de la Vega |
Ernesto Murillo Estrada |
Rodrigo Ticona Espinoza |
"La prensa hace luz en las tinieblas |
Portada de HOY |
Caricatura |