Mediante un comunicado, la Asociación Nacional de la Prensa (ANP) hace un llamado a la pacificación del país e invoca al diálogo democrático entre los sectores en conflicto para evitar que la violencia se convierta en lenguaje permanente de confrontación y para disipar el ambiente de zozobra entre la ciudadanía.
La ANP señala su profunda preocupación por el estado de peligrosa conflictividad en que ha derivado una movilización originada en las demandas salariales del sector menos favorecido de la Policía Boliviana.
Lamentamos que, en medio del ambiente de protestas, se cometan atentados contra la libertad de expresión y de prensa, y contra el trabajo de periodistas y medios de comunicación.
Rechazamos con firmeza el atentado explosivo que acalló a Radioemisoras Bolivia, registrado en la madrugada de este martes 26 en la ciudad de Oruro, y exigimos el esclarecimiento del hecho con la finalidad de acabar con la impunidad de los autores materiales e ideológicos de éste y de otros actos similares registrados en los últimos años.
Asimismo, condenamos las agresiones registradas contra 15 camarógrafos y periodistas del canal estatal de televisión en las ciudades de La Paz, Cobija, Trinidad y Santa Cruz de la Sierra, a quienes se confundió con agentes de espionaje mientras realizaban cobertura periodística del conflicto policial.
De la misma manera, la ANP censura la golpiza sufrida por la periodista de Radio Patria Nueva, Helen San Román, el pasado lunes, mientras realizaba su labor informativa en la Plaza Murillo de La Paz; así como las agresiones físicas cometidas contra la periodista Irene Tórrez, de la Red PAT en la ciudad de Oruro, mientras cubría el conflicto policial.
En este escenario donde la violencia amenaza al trabajo periodístico, la ANP reclama el respeto y las garantías para evitar la violencia contra profesionales que sólo cumplen con una tarea informativa reconocida por la Constitución Política del Estado (CPE).
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