Nuevas promesas femeninas

La tercera jornada de la competición preolímpica en natación de Estados Unidos tuvo como grandes protagonistas al 14 veces campeón olímpico Michael Phelps y las nuevas promesas femeninas, Missy Franklin y Breeja Larson.

Phelps fue el gran triunfador en la final de los 200 metros libres tras ganarle el duelo a su rival Ryan Lochte, mientras que Franklin, de 17 años, sorprendió con el triunfo en los 100 metros femeninos espaldas y Larson en la prueba de los 100 metros braza.

Phelps abrió la primera final de la jornada del preolímpico, que se celebra en la piscina de las instalaciones Century Link Center, de Omaha, Nebraska, con el tercer duelo consecutivo frente a su compatriota Lochte, esta vez en la final de los 200 metros libres, que venció con autoridad.

El ganador de 14 medallas de oro olímpicas, que perdió ante Lochte la final de los 400 metros estilos e hizo tercero en las semifinales de los 200 libres, en la final no hizo ninguna concesión y venció con un tiempo de 45’70 segundos.

Phelps no tuvo mucho tiempo para descansar porque después del triunfo en los 200 metros libres tuvo que participar en las semifinal de los 200 metros mariposas para quedar tercero con marca de 1:56.42 y lograr el pase a la final.

Luego llegaría la primera gran sorpresa de la jornada y de la competición al ver cómo Franklin, logró su primer pase a unos Juegos Olímpicos al vencer en la final de los 100 metros espalda femeninos a la gran favorita y campeona en Pekín 2008 Natalie Coughlin, que quedó tercera sin opciones de defender la medalla de oro.

Franklin mostró que el cambio generacional llegó a la natación de Estados Unidos después que Coughlin fuera la campeona en Atenas 2004 y Pekín 2008.

La joven nadadora, que llegó a la prueba de la final sólo 20 minutos después de concluir las semifinales de los 200 metros libres, fue de menos a más y superó a Coughlin para establecer una nueva marca nacional con un tiempo de 58’85 segundos.

Coughlin comenzó fuerte y se colocó por debajo del récord mundial en la mitad de la prueba, pero la campeona olímpica de 29 años no pudo mantener el mismo ritmo ni el poder de Franklin y Rachael Bootsma, la otra adolescente de 18 años, que la escoltaba, y le arrebató el segundo puesto y el boleto para Londres con un tiempo de 59’49 segundos.

Larson, segundo año con la Universidad A&M de Texas, también se impuso en la final de los 100 metros braza femeninos a su compatriota Jessica Hardy, que está en poder del récord del mundo y olímpico.

El nadador de 20 años, que no comenzó a competir hasta los 17, completó la prueba con un tiempo de 1 minuto y 05’92 segundos, mientras que Rebecca Soni, actual campeona del mundo, también superó a Hardy al quedar siete décimas (1:05.99) por detrás de la ganadora.