Washington.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, logró ayer el aval del Tribunal Supremo a su reforma sanitaria, la principal iniciativa de su mandato, en lo que constituye, según todos los analistas, una victoria clave a falta de cinco meses para las elecciones en las que buscará la reelección.
En medio de una expectación que no se producía desde que en el año 2000 el Tribunal Supremo tuvo que dirimir la presidencia entre George W. Bush y Al Gore, los jueces del alto tribunal sentenciaron ayer que la ley es constitucional en sus elementos esenciales, informó Efe.
Por 5 votos a 4 y con el inesperado apoyo del presidente de tribunal, John Roberts, normalmente alineado con los miembros conservadores, los jueces supremos aprobaron la disposición más polémica, la que introduce la obligación para todo estadounidense de contratar un seguro médico privado, so pena de multa.