México se enfrenta este domingo a las elecciones más trascendentales de su historia, en cuanto al número de cargos a elegir, pero también a las más vigiladas y a las que pueden resultar más amplias para su democracia y su futuro.
Agobiado por una violencia que crece sin cesar y que ha causado casi 60.000 muertos en los últimos seis años, oprimido por una corrupción que se ha infiltrado en todas las estructuras del Estado y en todas sus instituciones, abrumado por unas desigualdades socioeconómicas que resultan ofensivas, México se enfrenta a la incertidumbre de lograr revertir una realidad escandalosa e invivible para muchos de sus ciudadanos.
Casi 80 millones de mexicanos con derecho a voto tendrán que elegir hoy a su presidente para el próximo sexenio, a los 500 diputados de la cámara baja y a los 124 senadores, así como a varios gobernadores en distintos estados y algunas autoridades locales.
Los candidatos son: Josefina Vázquez Mota, candidata del derechista Partido de Acción Nacional (PAN); Enrique Peña Nieto, del Partido Revolucionario Institucional (PRI); Andrés Manuel López Obrador, del izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD); y Gabriel Quadri del partido Nueva Alianza.