Pese a observaciones COB apoyará las demandas de la novena marcha indígena

Mientras el Gobierno insiste en desarrollar el proceso de consulta tras la firma de un acuerdo con 45 de 63 corregidores del Tipnis y sin la participación de los dirigentes indígenas, la novena marcha logró ayer el apoyo de la Central Obrera Boliviana (COB) para defender los recursos naturales sin descartar la realización de un ampliado nacional en el que se determinarían mayores medidas de presión.

El secretario Ejecutivo de la COB, Juan Carlos Trujillo, y el secretario de Seguridad Social de esta organización, José Luis Delgado, confirmaron a EL DIARIO que apoyarán las demandas de la movilización indígena y la búsqueda del diálogo entre el Ejecutivo y la dirigencia reconocida por la novena marcha.

“Además de ratificar el ampliado que firmamos anteriormente en apoyo a la novena marcha, nosotros ratificamos el apoyo a los indígenas y como primera medida, exigiremos al Gobierno que dialogue con la columna de la marcha”, afirmó Delgado.

Si el Ejecutivo no establece el diálogo con los indígenas de Tierras Bajas, el ente matriz de los trabajadores convocará a un ampliado nacional, en la que no se descartan movilizaciones y otras medidas de presión para apoyar a la columna indígena.

“A partir de este ampliado, se podrían determinar posibles movilizaciones, vigilias y otras medidas de presión”, dijo.

Por otro lado, Delgado señaló que exigirán al aparato estatal, buscar una nueva alternativa para la construcción de la vía Villa Tunari-San Ignacio de Moxos y que no se vulnere más los derechos de los pueblos indígenas.

Por su parte, el principal dirigente de la COB, Juan Carlos Trujillo, aclaró que aún existen puntos con los cuales la organización laboral no está de acuerdo.

“Hay vacíos que tienen que ver con los contratos mineros y de hidrocarburos, son contratos de exploración y explotación. Si apoyamos estos puntos, atentaría contra los trabajadores, pero son aspectos que iremos aclarando en su debido momento y de manera interna”, sostuvo.

A tiempo de aclarar que la marcha indígena es un movimiento político, mas no partidario, el principal representante del Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasusyu (Conamaq) y líder de los campesinos de Tierras Altas, Rafael Quispe, informó del apoyo de la Central Obrera Boliviana (COB), lo que calificó como positivo e importante para el movimiento indígena.

“Se ha decidido en forma orgánica, que la COB nos va a apoyar, previa aclaración sobre el tema de la minería e hidrocarburos. Pero ambos estamos en contra de las empresas transnacionales, más bien el Estado debe potenciar a la minería estatal y comunitaria”, dijo.

Asimismo, informó acerca de un cabildo que se realizará hoy a las 10 de la mañana, en el peaje de la autopista de la ciudad de El Alto, junto a organizaciones alteñas y una comisión de la columna de la novena marcha indígena.

Respecto a la reunión sostenida entre el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana y 43 corregidores, el dirigente Rafael Quispe manifestó su molestia ante lo que considera una actitud “divisionista” del Gobierno en contra del movimiento indígena.

“El Gobierno siempre se va a reunir con sus afines, eso no nos sorprende. Sus afines duermen en hoteles y viajan en aviones, Fernando Vargas, no asistió porque los dirigentes no pensamos caer en ese juego que nos divide”, señaló.

El ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, en declaraciones a un medio televisivo, dijo que si la dirigencia de la novena marcha no participó de la firma del acuerdo con los corregidores, es porque quedó sin legitimidad atribuyéndose una representación que no les correspondería.

“Quienes viven en el Tipnis han cuestionado a los dirigentes porque ellos no saben los sufrimientos que se viven dentro de las comunidades”, declaró.