Los ejecutivos de la compañía Jindal Steel Bolivia (JSB) “abandonaron en la práctica el país, por lo que no quedaría otro camino que rescindir ese documento suscrito en 2007”, aseguró el ministro Mario Virreira.
La autoridad explicó que legalmente el contrato con la Jindal para la explotación e industrialización de hierro en El Mutún continúa vigente, por lo que, el Gobierno busca todavía una solución a las divergencias con esa empresa ante la falta de una representación legal.
Entretanto, la compañía hindú, mediante comunicado, desmiente esta versión y recuerda que el Estado boliviano a través del Ministerio Público, inició una persecución penal en contra de los principales ejecutivos de la empresa por el supuesto delito de incumplimiento de contrato y que estos decidieron no participar de negociaciones.