Tiene que ser Xabier

Este momento no se me ocurre otro profesional que no sea Xabier AzKargorta quien ocupe el cargo.

Los otros nombres que se manejaron son de técnicos nacionales que los últimos tres años marcaron diferencia frente al resto por lo conseguido: Mauricio Soria, Julio César Baldivieso y Eduardo Villegas, el primero salió de la lista tempranamente, el segundo no tiene buena relación con la dirigencia y expresó que quiere la misma oportunidad que tuvieron Erwin Sánchez y otros técnicos nacionales, luego de emitir declaraciones fuertes, las últimas 48 horas bajó el tono y se puso otra vez a disposición, aunque Azkargorta ya no lo tiene en sus planes y la F.B.F lo menos que quiere son problemas. El tercero ya propuso una planificación a largo plazo, necesaria por cierto, pero que la F.B.F no está en condiciones de llevar adelante.

Parte del convencimiento de Gustavo quinteros cuando asumió el cargo, fue lograr nuevamente el enamoramiento del pueblo que viene, pacientemente, caminando rumbo a la segunda década de fracasos permanentes. Ya sabemos lo que sucedió. No se pudo, tenemos demasiadas deficiencias en comparación al resto de las selecciones participantes en esta eliminatoria, la única forma de acercarnos un poco a los niveles expuestos es con mucho, pero mucho trabajo y elevando el nivel de competencia de nuestros jugadores. Como siempre suena sencillo el proponerlo pero casi imposible llevarlo adelante en la realidad en la que nos movemos.

En este escenario, quien resume, sintetiza y amalgama los sentimientos de esperanza, ilusión, confianza y credibilidad es el vasco. Xabier Azkargorta salió al cruce en todos los medios, respondió sobre fútbol, su vida, sus sueños, y todo lo que se le cruzó por la cabeza al periodista que tuvo al frente.

Para aquellos que sostienen que hace muchos años no dirige, les insinuaría que, con el nivel que tenemos en el país al profe con la cuarta parte de experiencia de su vida profesional le alcanza y sobra, no olvidemos la materia prima y las condiciones con la que cualquier profesional tiene que trabajar aquí en Bolivia.

Para los que sostienen que las condiciones cambiaron desde aquel 93 y que no podrá repetir lo soñado, recordarles que esto lo sabemos todos, pero en esta situación lo que necesitamos es alguien que asiente las nuevas bases y se transforme en guía en todo sentido, sobre todo para la dirigencia.

A él lo van a escuchar, no se si le harán caso, pero es uno de los pocos sino el único que puede encarar a cualquiera con autoridad, el que puede sentarse con el presidente del estado para conversar por que éste lo respeta y le tiene estima y lograr un acercamiento sincero (no como hasta ahora) entre el gobierno y la F.B.F, los jugadores lo idolatran, la gente le tendrá paciencia y aún sabiendo que no hay posibilidades, nos esperanzaremos que nuestra historia cambie, aunque sea un poquito.