Santa Cruz, (ANF).- El presidente del tribunal Tercero de Sentencia en lo penal de Santa Cruz, Carlos René Roca, determinó dejar libre de toda culpa a al ex presidenta del Concejo Municipal de la capital cruceña, quien fue acusada por los delitos de falsedad ideológica y uso de instrumento falsificado.
Desirée Bravo fue suspendida de sus funciones el 19 de marzo de este año por una resolución aprobada por el Concejo municipal, con siete votos a favor y tres en contra se aprobó la resolución que ordenaba el cese de sus funciones de manera temporal en el legislativo municipal.
“A María Desirée Bravo Monasterios absuelta de culpa, de la comisión de delitos de falsedad ideológica y uso de instrumento falsificado, se dispone la cesación de todas las medidas cautelares personales dictadas en su contra”, dijo el juez a tiempo de leer el fallo judicial.
Una vez culminada la audiencia, la ex presidenta del Concejo, aseveró que el proceso que le fue instaurado en 2010 por haber supuestamente falsificado una libreta escolar, aseguró que las acusaciones tienen tinte político. El caso por el cual se involucra a la concejala se remite al 23 diciembre de 2009, cuando el Servicio Departamental de Educación (Seduca) denunció que funcionarios de esa repartición recibían dinero para fraguar documentación diversa.
Sin embargo, Bravo dijo que esperará su restitución la cual dependería de la lectura oficial del fallo el día 16 de julio a las 18.00 horas, sin embargo, la concejal indicó que su regreso es el próximo paso a seguir terminado el juicio.
Un grupo de seguidores de Desirée Bravo se apostaron en puertas del tribunal, quienes mostraron su aceptación por el fallo resuelto por el presidente del Tribunal.
De acuerdo a la página digital del diario cruceño El Deber, Bravo anunció que iniciará los trámites legales para volver a ocupar su curul en el Concejo Municipal de Santa Cruz. Mientras tanto, festejó el fallo a su favor junto a sus seguidores en la plaza 24 de Septiembre.
Con el fallo de la justicia también se dispone la cesación de todas las medidas cautelares dictadas en su contra. “Estoy alegre porque se demostró que este juicio fue político”, dijo Bravo mientras sus partidarios pedían a gritos su retorno al Concejo Municipal. Su lugar lo ocupó el suplente Jorge Lavadenz.
Minutos después de atender a la prensa local, Bravo junto a sus seguidores se trasladó hasta la catedral para dar gracias al divino creador. “Vine a la iglesia (estaba cerrada) para agradecer a Dios porque siempre le pedí que sea él quien me juzgue”, aseguró. El juicio oral en contra de la concejala duró más de una semana.
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