La sociedad boliviana debate las noticias del día de forma inmediata a través de la redes sociales, luego surgen alegorías, fotomontajes o cualquier recurso audiovisual para expresar un voto de apoyo o de rechazo (me gusta, no me gusta) sobre el quehacer de los gobernantes.
El Internet, blog, Facebook y Twitter, se han convertido en herramientas para la difusión de criterios y el debate ideológico en la sociedad civil. Su influencia es tal, que en el mundo ningún político que se precie elude participar de estas plataformas de la nueva comunicación.
Los líderes de opinión pasaron de los medios tradicionales a los foros virtuales. Es el caso de Humberto Vacaflor, Iván Arias, Raúl Prada, Mirko Orgaz y otros menos conocidos afines al Gobierno como Ricardo Bajo o autoridades como Pablo Groux, quienes manejan grupos dedicados a llevar el debate político hacia Internet. Así también tenemos a los legisladores como Fabián Yaksic o Andrés Ortega, a dirigentes como Soledad Chapetón, Rafael Quispe o la feminista María Galindo, cada uno con su posicionamiento ideológico.