De acuerdo a la denuncia efectuada a EL DIARIO, por el Presidente del Transporte Internacional Gustavo Rivadeneira, en Desaguadero las labores de control migratorio, es administrado por grupos familiares de la región, las cuales fuera de perjudicar el control migratorio, ponen en riesgo la seguridad del Estado.
“No sólo por ser instituciones demasiado burocráticas, sino porque en el caso de Desaguadero el control migratorio esta en manos de unas cuantas familias quienes fuera de cometer nepotismo, ponen en riesgo la seguridad del Estado, porque no se aplica las normas internacionales”, aseveró.
Al momento se presenta una crisis en la administración de los controles tanto sanitario, migratorio y aduanero, aspecto que incide en la competitividad del control en desmedro del transporte internacional y del propios comercio exterior boliviano, dijo.
“En una reunión binacional desarrollada en Desaguadero se dio a conocer que en esta región los grupos familiares son quienes se hacen cargo de dicho control, factor que vulnera no sólo la seguridad de las personas en el ingreso y la salida en el punto fronterizo, donde se ha cometido más de un caso de trata y trafico de personas, por la falta de control”, recordó.
El representante del sector de transporte en la reunión binacional solicitó que los controles fronterizos estén a cargo del Centro Binacional de Servicios Controles Migratorios y Sanitarios (Cebasma).
“Incluso por parte de las autoridades del lado peruano han puesto a disposición un espacio para la construcción de dicha institución con la finalidad de que se logre integrar las instituciones binacionales del control fronterizo y con la finalidad de mejorar los controles en favor de la seguridad de ambos Estados”, expresó.
“Tenemos entendido que existen por día seis personas que controlan, y ellos responden a unas cuantas familias de Desaguadero, quienes no cumplen normas internacionales, en desmedro de la seguridad de la sociedad boliviana. Por lo tanto ellos llegan a sortear el puesto de trabajo entre estas familias, como si fuera una especie de toca, toca, donde unas cuantas familias monopolizan el control migratorio”, denunció Rivadeneira.
En tal sentido la dirigencia del Transporte Internacional, solicita que se apruebe la creación de la nueva institución fronteriza (Cebasma), para que opere en el puente nuevo con la finalidad de que llegue a controlar exclusivamente a los camiones que importan y exportan mercadería, con la finalidad de generar un mayor flujo al comercio exterior.
De acuerdo a Rivadeneira las seis personas que atienden el control migratorio en Desaguadero, no realizan una atención técnica, generando no sólo deficiencia en dicha atención, sino responden más a intereses personales que a las normas se seguridad de Estado en migración, de acuerdo a las actuales leyes nacionales e internacionales.
“Tanto el actual vicecanciller y ex representante de Bolivia en Washington Gustavo Guzmán, tienen que realizar las gestiones para que de alguna forma, se permita la atención del Cebasma para permitir que se facilite el control del comercio exterior de manera eficiente ubicados en el puente internacional donde llega el transporte peso internacional”, reiteró el dirigente.
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