Se comenzó a caminar

Luego de la designación y presentación de Xabier Azkargorta como director técnico de la selección boliviana, las opiniones y reacciones en esta ciudad se comenzaron a escuchar; lógico, el feriado hizo que La Paz recién se incorpore a la normalidad ayer mientras que el resto de los departamentos continuó con su habitual movimiento.

Me da la impresión que el carácter del profe cambió, esto lo había notado en los varios y diversos medios donde se presentó antes de su designación, tal vez sea por el tener que lidiar con tantas preguntas y cuestionamientos, no siempre llenos de buenas intenciones de quienes desean marcar diferencias el momento de conseguir una declaración, lo cual es válido, ya que los personajes públicos tienen que soportar pacientemente los embates de los que siempre queremos un poquito más.

Las redes sociales, programas radiales y televisivos pusieron a disposición del público en general la posibilidad de opinar sobre el tema, es sabido que cuando se abren micrófonos, el universo de opiniones es variado; cada uno desde su óptica, expresa más lo que siente que lo que piensa. Los que intentan analizar el tema no tienen el back up de información que les permite realizar este ejercicio de manera adecuada y se terminan escuchando posturas serias, positivas, negativas, graciosas, desubicadas o coherentes.

Hasta que la selección boliviana dispute el amistoso frente a Benin el mes que viene, el humor de la gente será igual de cambiante con amplia ventaja de quienes quieren que el arranque sea bueno, luego Perú y Uruguay cierran la lista de compromisos este 2.012.

Bajo el discurso que los partidos hay que jugarlos para ganarlos o perderlos comenzó a dar sus primeros pasos este nuevo desafío donde el vasco tendrá que dar muchísimas explicaciones en el caminar de estos 18 meses que dura su contrato.

Muchos desean que provoque el milagro de revertir todo simplemente con su presencia o con su retorno y ojo, hay que tener conciencia que no será así.

Inclusive el peso de los recuerdos hace que se le obligue en algún momento a conseguir buenos resultados cuando estos no se pueden garantizar de ninguna forma y manera. En el fútbol, no es directamente proporcional el trabajo realizado o las buenas intenciones que se tienen con los resultados que se consiguen. Menos podrá recuperar los puntos que se perdieron ante Colombia y Chile, se perdieron y punto, ya es historia, a lo máximo que puede aspirar y no será poca cosa, es a que la selección tenga un patrón de juego, una identidad, mas allá de buenos funcionamientos. Se puede tener una gran personalidad futbolística pero si se sigue perdiendo, no sirve de nada. Hay que valorar su presencia no tanto por los resultados que pueda conseguir, que no cambiarán nuestra situación en la clasificación inmediata. Variarán, desde mi punto de vista, en las posibilidades ciertas. Es la confianza que tengo que vaya perforando desde su lugar este sistema maleado que seguirá volteando técnicos y frustrando nuestras pretensiones.