Conflicto de la terminal de buses pone en alerta a las autoridades

Oruro, (EL DIARIO).- El conflicto de la Terminal de Buses de Oruro puso en alerta a las principales autoridades de este departamento, como la alcaldesa, Rossío Pimentel y el gobernador, Santos Tito, para demandar al gobierno una inmediata solución a ese problema que data de hace casi un mes, cuando se inició una huelga de hambre de seis trabajadores.

Las dos autoridades de Oruro enviaron una carta al ministro de Obras Públicas, Servicios y Vivienda, Arturo Vladimir Sánchez, para pedirle una solución del conflicto de la Terminal, para evitar el caos, la delincuencia y la improvisación de los servicios que tiene, desde que fue intervenida por parte del Comité Cívico y la Central Obrera Departamental.

El secretario con los movimientos sociales, David Rojas, informó que la carta fue remitida con la firma de las dos autoridades, explicando la complicada situación de inseguridad que se vive en ese sector, provocando malestar entre los miles de usuarios de buses que llegan y viajan al interior y exterior del país.

“Las calles son inseguras. Existe basura en todas partes. Esto no puede seguir en esas condiciones. Es lamentable que no se haya resuelto ese conflicto”, dijo Rojas.

Los pasajeros utilizan incluso servicios sanitarios improvisados en la calle, para hacer sus necesidades, los vendedores de dólares instalaron un vehículo en una calle aledaña a la terminal para realizar transacciones, mientras que los delincuentes, en gran cantidad, se encuentran al acecho. También existen bultos y equipajes en las calles y los sobres que llegan a Oruro se quedan en el suelo.

“Hasta cuándo vamos a estar en estas condiciones”, dijo uno de los vendedores de boletos de flotas. “Parece que no hay autoridades en Oruro”, dijo un pasajero. La crisis llegó al colmo, cuando alrededor de la terminal abundan los basurales, provocando indignación en la ciudadanía, por esta clase de servicios.

La alcaldesa y el gobernador explicaron en la carta conjunta que la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Telecomunicaciones y Transportes (ATT) no ha resuelto el conflicto, a pesar de las gestiones que realizaron el Comité Cívico y la COD, para que se efectúe la reversión de la terminal de buses Hernando Siles, a poder del Estado.

El ejecutivo de la COD, Germán Chaparro, dijo que el gobierno no ha tomado con seriedad este problema, a pesar de las denuncias de maltrato y abuso de parte de las personas que tienen bajo su administración ese edificio, ubicado en la calle Villarroel, entre Bakovic y Brasil.

“El caos está provocando más problemas e inseguridad. No sé qué es lo que están esperando las autoridades nacionales, para efectuar la reversión del edificio”, explicó.

Mientras tanto, los choferes de flotas vacían la basura en plena calle, sin control de ninguna naturaleza. Los funcionarios de Tránsito ni siquiera se percatan de esas irregularidades ni de la forma en que suben y bajan los pasajeros. Los ayudantes de flotas bajan los equipajes sin control ni seguridad y dejan los envíos en plena calle, obstruyendo el paso de los peatones.

La terminal fue tomada por la COD y el Comité Cívico de Oruro el 4 de julio pasado y desde entonces, no se ha logrado una solución al conflicto. Las dos instituciones reclaman la reversión del edificio que también funciona como hotel de tres estrellas, desde el 10 de febrero de 1983.