Mítico payaso

Ariel Baptista actualmente dirige el grupo de teatro payaso “Tabla Roja… la esencia del payaso” que trabaja sobre la filosofía, psicología, poética, vida y práctica del payaso y con estos conceptos ha dirigido y actuado en “Empayasados”, obra premiada y reconocida con el Premio Franz Tamayo como Mejor Obra Teatral.

Es organizador del Encuentro de Artes Payasas “Empayasados”, festival de payasos independiente que se realiza anualmente. De igual manera, gestiona los Retiros de Formación Payasa y Teatral a orillas del Lago Titicaca, conjuntamente con la comunidad de Santiago de Huata.

La misión de “empayasar” el mundo trae en sí, el compartir, el transitar los estados en los caminos que nos llevan a conocer gente hermana en el mundo, un simple hecho, un deseo, una emoción… “empayasar”. Ariel nos cuenta más sobre el mundo del payaso.

¿Cuándo despierta tu admiración por el eterno personaje,

el payaso?

Hace cuatro años tuve la oportunidad de conocer a dos seres maravillosos. Payasos, actores, viajeros, músicos y hermanos; Julia Monti y Lucas Cristofaro de Vincenti, ambos argentinos, que despertaron en mí ese sincero, loco, tierno y transparente personaje, el payaso.

¿En qué momento decides dedicarte a este arte escénico?

A las artes escénicas desde muy pequeño y específicamente a navegar en las aguas payasas hace cuatro años. Esta última convicción fue muy fuerte, marcó mi vida y mi entorno en ella.

¿Qúe estudios complementan la vocación de payaso?

Es importante complementar al payaso con los diferentes lenguajes teatrales y artísticos. También al actor con los diferentes lenguajes payasos, algo así como un payaso actor o actor payaso. Comencé haciendo teatro y luego formé parte del Teatro Trono en El Alto. Ya en la formación payasa tuve la oportunidad de ser becado por la International Clown School para hacer un seminario de entrenamiento intensivo en Argentina y en muchos lugares con los mejores maestros.

¿Cómo fue tu debut atrás del maquillaje de payaso?

¡Con mucha adrenalina y nervios! Me sorprendía tener tanta libertad de juego en escen. Era una responsabilidad grande el salir al frente sin ningún tipo de capas, sincerarme y jugar mis fracasos.

¿Qué tipo de payaso te gusta personificar? ¿Cuál es tu

nombre artístico?

Mas allá de personificar, es más un estado de juego en el presente instantáneo. Ahí, soy Ligero. Así se llama, es un ser maravillado por la vida, sincero ante todo, aferrado al amor. Un poeta inconcluso que se enamora, se compromete, juega por los extremos emocionales. Ligero es ligero como una pluma, se deja llevar en los impulsos.

¿Cuál es la realidad de este arte en nuestro país?

Primero debemos enfocar bien a qué arte nos referimos. El oficio de payaso de animación infantil es completamente el contrario al arte del payaso que nosotros llevamos como premisa, pero en nuestro cotidiano la imagen los ha puesto en la misma bolsa. Nosotros no intentamos buscar una risa fácil poniendo en ridículo a otros. Al contrario, preferimos mostrar nuestro ridículo sincero, espontaneo, que nos permita amar y odiar en instantes. Así podemos ser parte de este juego de ajedrez con el público donde nosotros navegamos por una situación y ellos se sienten identificados porque a ellos también les cuesta decir lo que sienten. Entonces, el payaso al que nosotros llevamos al frente, desnudo y fuera de complejos, con ganas de jugar, se encuentra en una realidad en la que empieza a ganar terreno, en la que encuentra gente interesada en formarse en este arte como medio de sanación, entrenamiento teatral o porque simplemente es importante para esta vida.

¿Es el payaso un personaje teatral menospreciado por colegas?

Durante mucho tiempo los colegas han tomado la imagen del payaso como arte menor debido a otras fuentes que nos mostraban un payaso que no era capaz de transitar por territorios dramáticos, contestatarios; lugares que el payaso sí se permite investigar. Cuando algún compañero nuestro hace una tontería o nos hace reír utilizamos, de mala manera, la palabra payaso. La utilizamos para calificar una acción como inservible, innecesaria. Se utiliza el término para menospreciar y quitar el valor a esta persona, cuando la palabra payaso engloba dentro de su real sentido amor, sinceridad, lucha, fuerza, caídas, estrellas, una tarde de sentarse a pijchar coca y hablar de la vida… al ser humano en su completa humanidad.

¿Para cuándo tiene prevista la puesta en escena en La Paz?

Planificamos tener funciones en comunidades campesinas, en El Alto y en La Paz ya será en la Casa de la Cultura o el Teatro de Cámara. Estaremos avisando las fechas concretas.