Seguir haciendo historia

El español Fernando Alonso (Ferrari) dio un importante paso hacia su tercer título mundial de Fórmula Uno al redondear un fin de semana de ensueño en Hockenheim, donde, después de firmar la ‘pole’ el sábado, ganó el Gran Premio de Alemania, la décima prueba del campeonato.

Con este nuevo triunfo, Fernando se sitúa a una victoria del inglés Nigel Mansell, que posee la cuarta mejor marca de todos los tiempos, por detrás del alemán Michael Schumacher, que ganó 91 veces; del francés Alain Prost, vencedor en 51 ocasiones; y del brasileño Ayrton Senna, que festejó 41 triunfos antes de fallecer accidentado en Imola (Italia).

Alonso sigue haciendo historia y, pase lo que pase, se irá de vacaciones encabezando el Mundial de los seis campeones, porque sus 154 puntos no los superará nadie el próximo fin de semana en Hungría.

Alonso efectuó una gran salida, pero venía fuerte por detrás. Ambos fueron abriendo hueco, con el alemán rodando las primeras vueltas a unas nueve décimas del español.

Por detrás venía bien Button y ‘volaba’ el mexicano Sergio Pérez (Sauber), duodécimo en la calificación, pero sancionado con cinco puestos en parrilla y que había salido decimoséptimo.

Mientras Lewis Hamilton se hundía en su centenario en F1, Button paraba en la vuelta 19. Y Vettel, dos más adelante, devolviéndole el liderato a Alonso, que ya no cedería el primero hasta meta.

Tras la reordenación, en la 23, Fernando comandaba con dos segundos sobre el alemán, 5,6 sobre Button y con 11,8 sobre Raikkonen, que rodaba cuarto.

A 10 vueltas para la meta, Alonso le llevaba seis décimas al inglés y 2,8 segundos a Vettel; con Raikkonen, cuarto, a 14,4; y los dos Sauber de Kobayashi y Pérez en quinta y sexta posición.

El gran triunfador fue Alonso, que sólo tuvo que controlar el paseo hasta meta y festejar su trigésima victoria en su última carrera con 30 años.