I
Corromperse es perder o alterar el sentido de justicia que el alma equilibrada tiene a lo largo de la vida de una persona; lo cual sucede cuando el ego, el yo se desequilibra al ponerse delante de todo cuanto hay y deja de mirar a los otros, para únicamente verse a sí mismo, es decir, cuando se desencadena el egoísmo en su forma más desarrollada. Que ese mal aqueja a la humanidad desde que el hombre es hombre ha hecho que la parte sana de la humanidad cree mecanismos de control y de castigo para quienes caen en la corrupción. Ese es el nacimiento de la ley, escrita o no, que juzga y castiga a quien comete actos injustos, moralmente sancionables; y en el caso del empleo más frecuente de este término, el de los delitos económicos.
El periodista Roberto Cuevas Ramírez ha escrito un libro acerca de la quiebra de bancos en Bolivia en los últimos veinte años, con el título del presente artículo. En su investigación parte de la quiebra del país en los años ochentas, que dio origen al famoso DS 21.060 y a la reactivación económica con 1.583 millones de dólares, contratada de organismos internacionales, la cual en gran parte fue destinada a la banca para que conceda préstamos a la industria y el comercio con el objetivo de salvarlos y volverlos competitivos; pero que dio origen a una gigantesca estafa por parte de banqueros, comerciantes, políticos y abogados inescrupulosos, los cuales conformaron una cadena en la que unos protegían a otros en una mafia que se ha aprovechado del país, de los ciudadanos que con sus impuestos han pagado esa deuda. Cuevas Ramírez estima esa estafa en mil millones de dólares, con el consiguiente freno al desarrollo buscado, y que dio pie a la reciente frustración nacional.
¿Cómo lo hicieron? Cuevas Ramírez denuncia que hubo empresas que con un capital de 400.000 Bs obtuvieron créditos por 4.015.244,96 dólares americanos, con Garantías inexistentes, y luego fueron quebradas, dejando la deuda sin pago alguno. O “En noviembre de l994 son liquidados los bancos Sur SA y Cochabamba SA con una pérdida en el sistema financiero de 400 millones de dólares en sólo cinco meses, cubiertos en efectivo por el Banco Central”.
Se supone que un banco tiene una organización racional, con controles contables diarios, semanales, mensuales, etc.; que concede préstamos después de una escrupulosa evaluación del crédito solicitado y ejerce estricto control sobre los bienes entregados como garantía de préstamos; que cuenta con un cuerpo jurídico capaz de evaluar los riesgos legales y de seguir juicios eficaces a los deudores morosos para recuperar las deudas. Además está controlado por la Superintendencia de Bancos, de ese entonces.
¿Cómo pueden suceder esas quiebras? Sencillo, los ejecutivos, muy respetuosos de la ley y estrictos cumplidores de la misma, toman férreamente el control de su banco y deciden, por sí y ante sí la concesión fraudulenta de créditos, con la complicidad de secuaces que están dentro y fuera de él. Por ejemplo: un banco concede crédito por 900.000 dólares a la empleada doméstica de un ejecutivo con sólo la fotocopia del carnet de identidad de la solicitante, quien a las 9 de la mañana firma el formulario de solicitud de crédito, y el cheque por el monto del préstamo sale a las 5 de la tarde, en un caso de celeridad y eficiencia dignos de tomarse en cuenta.
Otro caso de eficiencia es cuando los ejecutivos tienen la evidencia de la quiebra de su banco y autorizan el pago de dos cheques girados por los mismos que los han de cobrar, uno por 4.200.000 dólares, y otro por 4.231.938.28 dólares, con diferencia de diez minutos entre una y otra operación, y ambos reciben esa suma en efectivo. Me pregunto, ¿cómo han podido los cajeros contar tal volumen de dinero en efectivo en tan poco tiempo? Esas personas merecen un premio a la rapidez por la exactitud del pago, teniendo en cuenta que entregaron 28 centavos de dólar a uno de los clientes.
Pero no es todo, cuando la Superintendencia entró en juego a la quiebra de ese banco, no encontraron rastros de entrega del dinero en fiduciario por parte del banco a las cajas que pagaron semejantes montos. Como se puede advertir, en esos lugares se producen milagros.
Usurpado el 7 de octubre de 1970, por defender EL DIARIO |
Dirección:
Antonio Carrasco Guzmán
Jorge Carrasco Guzmán Consejo de Administración:
Miguel Lazo de la Vega |
Ernesto Murillo Estrada |
Rodrigo Ticona Espinoza |
"La prensa hace luz en las tinieblas |
Portada de HOY |
Caricatura |