Los tres cadetes del segundo año de la Academia Nacional de Policías (Anapol), que fallecieron en circunstancias aún no esclarecidas, cuando cayeron de una baranda que se desplomó, no contaban con el seguro de vida correspondiente, lo que fue ratificado por el Ministro de Gobierno Carlos Romero.
La muerte de los tres cadetes de segundo año sucedió el 22 de junio, cuando una baranda de las escaleras de emergencia de la Anapol cayó, desestabilizando a más de 50 cadetes que transitaban por el sector.
Sin embargo, al respecto uno de los padres de familia que no quiso ser identificado, dio a conocer que ellos aportaron para que sus hijos cuenten con un seguro de vida, pero se denunció que la casa de estudio policial no renovó este beneficio para esta gestión, el que había fenecido en mayo del año pasado.
Otra de las denuncias que se pudo conocer es que el accidente fue provocado por tres cadetes de cuarto año, debido a que en el momento del accidente los afectados eran impulsados con descargas eléctricas.
El ministro Romero, consultado sobre los avances de la investigación no quiso prestar ninguna declaración y se limitó a señalar que solamente se está esperando el informe oficial, para que luego se pueda aplicar los procedimientos del caso de existir responsables.
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