Los cuerpos de Yesenia y Erika Quenta de la comunidad San Andrés de Machaca no pueden ser encontrados tras cinco días de infructuosa búsqueda en las aguas del río Desaguadero que habría llevado a las infortunadas hasta algún lugar inaccesible.
De acuerdo con los datos recopilados por los familiares de las infortunadas, las dos hermanas de ocho y seis años, respectivamente salieron de su domicilio el domingo por la mañana y aproximadamente a las 13.00 horas, una de ellas dio un pie en falso y fue arrastrada por las aguas del citado río. En el afán de auxiliar a su hermana, la menor también fue arrastrada por la corriente del río. Minutos más tarde, algunos comunarios vieron pasar los cuerpos por el río.
Desconsolada por el hecho, Zenobia Quenta, la madre de las niñas, pidió a las autoridades la colaboración para recuperar los cuerpos de sus hijas.
“No puedo dormir desde ese día, no sé qué más puedo hacer”, dijo la madre a los medios de comunicación, tras cinco días de infructuosa búsqueda.
Tanto la Unidad de Bomberos como los vecinos de la comunidad de San Andrés de Machaca intentaron vanamente este viernes llegar a sectores de accesibilidad difícil para buscar los cuerpos de las pastoras.
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