Representación boliviana respalda al cruento régimen sirio de Al Asad

La masacre que sufre Siria por obra y gracia del régimen de Bachar al Asad fue condenada por la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) mediante una resolución firmada por los países miembros, menos los países del bloque del Alba: Cuba, Venezuela, Nicaragua y Bolivia, aunque Ecuador sí respaldó a la mayoría.

Según la agencia EFE, el embajador boliviano, Rafael Archondo, reconoció que la ONU debe actuar para frenar la crisis, pero alertó de que “hay claros límites” a esa acción dentro de la Carta de Naciones Unidas, a la que la resolución de este viernes es “contraria”.

“Esta resolución simplemente empeora el problema”, añadió el diplomático boliviano, quien señaló que “abre un camino equivocado” ya que su propósito “no es cesar la violencia sino derrocar al Gobierno de Damasco”.

Para el politólogo Erick Fajardo el país se adhiere a las peores expresiones de autoritarismo del fundamentalismo islámico, dejando una larga tradición diplomática que siempre mantuvo a Bolivia en el grupo de países no alineados en el conflicto entre oriente y occidente.

“El país sale del grupo de países no alineados, es decir que toma partido y se suma a esos “estados forajidos” que se resisten a la fiscalización internacional, al respeto a los tratados y pactos de la comunidad internacional, que violan los derechos humanos, que masacran a sus ciudadanos sublevados y que desconocen las libertades fundamentales y sus mecanismos jurídicos de respaldo”, dijo.

Por su parte, el embajador de Venezuela ante la ONU, Jorge Valero, dijo que la resolución no es objetiva y constituye una intervención en los asuntos internos de un estado “soberano e independiente”.