Rayos entre ruedas

El británico Jason Kenny sobre una bicicleta, se proclamó en Londres el hombre más rápido del mundo al imponerse en la final de velocidad individual al francés Gregory Bauge.

Con su segundo oro en estos Juegos, junto con el que se colgó en velocidad por equipos tras batir el récord del mundo de la disciplina en Pekín 2008, sucede como ganador olímpico a su compatriota y compañero de selección Chris Hoy, que disputará la prueba de keirin.

El británico se impuso en las dos mangas de la final, primero con un ataque de larga distancia, que el francés aguantó únicamente durante los primeros 250 metros, para quedar después sobrepasado por el empuje de Kenny.

En su segunda oportunidad de frenar al británico, Bauge no tuvo fuerzas para superar a su rival, a pesar de que ajustó el resultado de la carrera en el sprint final.

El australiano Shane Perkins, se llevó la medalla de bronce al ganar la carrera por el tercer y cuarto puesto al trinitense Njisane Philllip. EFE