Mandatario alabó la inversión pública e ignoró la inversión extranjera y privada

El presidente Morales se regodeó con los números y pinto a un país en bonanza, con un alto crecimiento en los ahorros y en la inversión pública, aunque no mencionó a la empresa privada y la inversión extranjera, temas que quedaron ausentes de su discurso.

“Bolivia está en nuestras manos y sólo necesitamos estar unidos, pensando en la gente que nos necesita. Por esto, frente a los problemas que se nos presentan sólo queda seguir trabajando por el pueblo boliviano. Desde acá seguiremos sirviendo al pueblo boliviano, reconocemos nuestros errores, pero jamás habrá traiciones”, dijo Morales al final de su discurso en tono eufórico.

Empezó citando el caso de YPFB que en el sexenio previo a su llegada al poder recibía 300 millones de dólares anuales, mientras ahora recibirá 3.500 millones de dólares, producto de la nacionalización.

En el momento de referirse a las recaudaciones tributarias destacó que en su gestión se cobra 5.800 millones de dólares anuales frente a los 2.000 de las gestiones anteriores aunque no precisó si este monto es anual o de un sexenio.

También preciso el crecimiento del ahorro de 3.700 millones de dólares a 11.760, el crecimiento del préstamo de 3.600 a 9.046 millones de dólares actuales y la baja de la mora bancaria del 10,1% a 1,7%.

“Debo recordarles que el número de cuentas del sistema financiero registró un crecimiento de 1.911.000 a 5.937.000, pienso que es porque el pueblo confía en la administración”, destacó.

“Nuestra obligación es recuperar los recursos naturales de manos privadas, pero también es recuperar a la gente que se está confundiendo. El pueblo no quiere terratenientes en Bolivia. Debo recordar que somos tan diversos, pero lo importante es que todos tenemos los mismos derechos y deberes y los recursos están en manos de las regiones y la autonomía es para algunos una carga”, expresó Morales.

En el momento de hablar de la agenda que tiene al frente habló de la producción del litio sin ingresar en detalles. “Tuvimos problemas con el hierro, pero vamos a invertir en el Mutún. Arrancamos con la planta separadora de líquidos y reitero mi confianza en el Presidente de YPFB que es un hombre sano y seguirá en el cargo”, expresó frente a las críticas de dentro y fuera que recibe Carlos Villegas, respecto a la adjudicación irregular de las plantas separadoras de líquidos que siguen operando en el país.

Es más, Morales se refirió a la instalación de una planta de petroquímica en Yacuiba para el desarrollo de esa región. “Estamos dando el valor agregado a nuestros productos”, puntualizó.

Así es como llegó al punto central de su discurso económico para señalar “estamos cerca de cambiar totalmente a Bolivia… estamos en una nueva era, con nueva tecnología. El 2025 estaremos con cero de extrema pobreza”.

Tocó el tema de la corrupción sin ingresar en detalles al afirmar: “No entiendo a algunas autoridades que siguen pensando como antes y tienen que descolonizarse y a aquellos que han cometido estas faltas se les dará un severo castigo sea quien fuere. La justicia está para meter a la cárcel a los corruptos sean del MAS o de cualquier otro partido”.

Tampoco precisó el tema de la coca y el narcotráfico aunque expresó que “en los parques nacionales no se permitirá el cultivo de la coca y de ese tema discutimos bastante con las Fuerzas Armadas. Vamos a cuidar el primer Regimiento Ecológico para cuidar con los grupos sociales esas áreas”.