La vigilia instalada hace 147 días por las víctimas de las dictaduras en inmediaciones del Ministerio de Justicia aún no logró la respuesta del Gobierno y tuvo que sufrir una baja por el deceso de un integrante de la medida de presión.
Felipe Mita Ticona habría fallecido el pasado sábado, víctima de un cáncer terminal que adolecía su cuerpo. Al parecer no resistió los tratamientos de quimioterapia, que además de dolorosos eran demasiado costosos; sin embargo, estas personas tendrían derecho a la atención médica por medio de la Caja Nacional de Salud.
El director del Instituto de Terapia e Investigación sobre las Secuelas de la Tortura y la Violencia Estatal, Andrés Gantier, lamentó la indiferencia del aparato gubernamental, ante lo que es una “obligación”. La medida de presión está amparada en la Ley 2640.
La secretaria general de la Plataforma de Luchadores Sociales y Víctimas de la Violencia Política, Victoria Morales, recordó que en una reunión sostenida con el entonces diputado Evo Morales le pidieron su apoyo en la la aprobación de esa norma; sin embargo, pese a su vigencia hasta la fecha, no hay solución a este conflicto.