Todo lo que se construye en el mundo interior llega a manifestarse en el mundo exterior

Las palabras son las fuerzas básicas de la mente que permiten construir o destruir nuestro propio destino, pues actúan en los dos planos de la mente, en el plano consciente y en el plano inconsciente.

Las palabras pronunciadas irresponsablemente o bajo la influencia de intenciones negativas, terminan siempre por destruir a su creador; en cambio, las palabras pronunciadas de manera responsable y deliberadamente positiva producen efectos constructivos y fortalecedores en la persona que utiliza de esta manera estas fuerzas.

La tarea de aprender a configurar, programar y construir nuestro mundo interior es de vital importancia para conseguir que nuestra vida personal se convierta en una serie de acciones exitosas y de resultados satisfactorios y ecológicos.

La correspondencia que existe entre el mundo interior de una persona y su realidad externa puede ser fácilmente observable y observando los detalles del mundo externo de cualquier persona, se puede apreciar a través de la deducción, cómo es el mundo interno de pensamientos, de opiniones, de criterios y hasta de prejuicios que tenga dicha persona observada para fines de aprendizaje y de experimentación.

Al descubrir esta maravillosa correspondencia entre el mundo interior de cada persona y su mundo externo, podemos beneficiarnos del conocimiento de este principio para comenzar a trabajar en la elaboración positiva de nuestro propio mundo interior, sabiendo que todo cambio que registremos e imprimamos en nuestro mundo interior llegará a convertirse en una realidad exterior por el simple trabajo del principio de manifestación.

Cada nuevo pensamiento positivo que imprima en su mente profunda llegará a convertirse en una circunstancia, en una acción o en una hermosa realidad, por lo tanto, ya puede comenzar la tarea de pensar un pensamiento que usted quiera que se convierte en realidad en su mundo personal y el mejor momento para hacerlo es el momento de la relajación en el cual usted se recuesta, cierra los ojos y suelta todas sus tensiones musculares y a continuación se pone a pensar rítmicamente: “todo está mejorando en mi salud” y debe repetir dicho pensamiento sólo con la voz interior y no de manera verbal.

Puede usted usar el mismo procedimiento para imprimir cualquier otro pensamiento que quiera ver convertido en una hermosa realidad; antes de finalizar este artículo quiero desear para usted querido lector o querida y fiel lectora, que todos los conocimientos que usted ha ido aprendiendo se conviertan en hermosas realidades y que su vida que es tan valiosa y sagrada, brille con el resplandor de Dios para alegría y beneficio suyo y de los seres que tanto ama; nos vemos en el artículo de mañana.

Afirmación para escribir veinte veces por una semana:”Cada siembra tiene su respectiva cosecha y en su cantidad precisa”

Nota Importante: Los programas de cambio y mejoramiento de las conductas de doce días producen personas positivas y sensatas capaces de responsabilizarse de sus vidas y de sus estudios o de sus asuntos con las habilidades mentales de concentración y con las habilidades corporales que se aprenden.

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