Sé sincero en el pensamiento

Jamás se alegre del mal ajeno ni sea enemigo gratuito de nadie en el pensamiento pues en el mundo de los pensamientos, las realidades son un tanto diferentes de las realidades del plano físico de existencia.

Cada que pensamos en una persona, nuestro pensamiento nos conecta con la misma y se produce el fenómeno de la doble o mutua influencia y se produce el intercambio de energías sutiles según leyes precisas por las cuales la persona de inferior vibración se beneficia con la energía de la persona de vibración superior y, a su vez, la persona de vibración superior se perjudica con la energía negativa de la persona de vibración inferior, por lo tanto, no es conveniente evocar o pensar irresponsablemente en las personas negativas ni en sus problemas pues sin saberlo nos conectamos con vibraciones inferiores que solo pueden causarnos perjuicios en vez de beneficios y los efectos se los siente en forma de un misterioso cansancio o de una fatiga excesiva que nos priva de la energía vital sana que podríamos utilizar para emprender acciones necesarias para realizar nuestro éxito personal.

Conviene lanzar con nuestro pensar solo afirmaciones de bien y amistad hacia todos los demás y amar a amigos y enemigos por igual pues de esta manera elevamos la frecuencia vibratoria de la sociedad en general y además, nos beneficiamos con la protección que nos brindan los pensamientos benéficos y sinceros con los cuales aumentamos y mejoramos nuestros valores personales y nuestra salud en general.

Con solo cerrar los ojos y pensar en los demás, podemos conectarnos con todos “los demás” y entrar en comunicación íntima, en el nivel mental, y aprovechar de esta situación para aprender a mandar pensamientos gratos y sinceros que son substancias reales que llegan, benefician y retornan al emisor, por lo tanto, sería conveniente que recordemos la ley del amor:

“Recibirás sólo lo que des, en la misma medida, en la misma cualidad y en la misma condición y siempre que des podrás dar más, entendiendo que el dar debe comenzar en el pensamiento y hay que aprender a dar solo a quien sepa recibir y agradecer”.

*Cosas sorprendentes y maravillosas suelen suceder cuando entramos en un estado de paz y de quietud, la postura más aconsejable es la sedente, es decir la postura de “sentados” y luego proceder a cerrar los ojos y comenzar a imaginar a los demás, luego se debe pensar en sus necesidades y problemas, y a continuación visualizar la materialización de sus sustentos, como si llegaran del cielo y luego procedemos a visualizar las soluciones que van llegando a sus cabezas y corazones, a continuación pedimos a la providencia que tome en cuenta esta visualización simbólica y que encuentre la manera de realizarla a su manera, luego damos gracias y disfrutamos de ver con los ojos de la mente a una sociedad más positiva, más madura en la que el entendimiento y la buena voluntad comienza a producirse a nivel general.

Si cada lector hiciera este pequeño ejercicio mental durante siete días, podría aportar con energías sanas a un proceso de sano mejoramiento de nuestra paz y de nuestra mentalidad como país.

Comentario: Querido lector, querida lectora aún hay muchas personas que no saben que estos artículos de Inteligencia Emocional se publican todos los días y que se pueden coleccionar, le ruego que pase la voz a todos los que pueda con la seguridad de que toda buena acción que se hace en este mundo, se convierte en una mejora en nuestro propio hogar y se manifiesta como una mejor salud en el alma y en el corazón, gracias por su buena acción.

Afirmación para escribir veinte veces:”Pinto de color violeta toda realidad negativa que me perturba desde la palma derecha de mi mano”

Nota Importante**: Los programas de cambio y mejoramiento de las conductas de doce días producen personas positivas y sensatas capaces de responsabilizarse de sus vidas y de sus estudios o de sus asuntos con las habilidades mentales de concentración y con las habilidades corporales que se aprenden.