Periodistas cerraron la Feria del Libro debatiendo sobre libertad de expresión

La Asociación de Periodistas de La Paz (APLP) junto a la Fundación Konrad Adenauer Stiftung (KAS), realizaron una mesa redonda como parte de los actos finales de la Feria del Libro. Esta organización aportó con el foro debate denominado “Libertad de Expresión, Censura y Ética Periodística”.

Entre los panelistas, asistieron el presidente de la APLP, Antonio Vargas y el secretario de Prensa y Cultura de esta entidad, Sandro Velarde, así como el representante del Observatorio Nacional de Medios (Onadem), Erick Torrico, el abogado constitucionalista Santiago Berríos, el periodista y representante de la Asociación Nacional de la Prensa (ANP), Juan León Cornejo y como parte del Ministerio de Comunicación, Claudio Rossell.

La organización de los periodistas estuvo presente en la Feria del Libro después de diez años, con la nueva gestión que pretende insertar en la sociedad un debate abierto sobre la problemática de los medios de comunicación y la liberta de expresión como un derecho civil que concierne a toda la sociedad.

El director general de medios estatales, Claudio Rossell manifestó que en la actual coyuntura los medios de comunicación supuestamente perdieron la objetividad, asumiendo posturas políticas en el proceso de cambio.

Para el titular de la APLP, Antonio Vargas, los medios de comunicación independientes cumplen su labor y conocen que existe una marcada diferencia entre la libertad de expresión y el “libertinaje” de expresión.

“Esto último es un uso desenfrenado de la libertad que no respeta el límite natural que se tiene en la libertad. En este sentido, la libertad de expresión jamás ha sido utilizada como un libertinaje porque reconoce la responsabilidad en su ejercicio”, afirmó.

Por otro lado, puntualizó que la libertad de expresión es un elemento fundamental de la democracia porque permite la generación del debate permanente en busca de la verdad, ratificando que sin libertad de expresión no hay democracia.

Asimismo, hizo referencia a la relación existente entre el actual Gobierno y la prensa, la que calificó como conflictiva, debido a la constante fiscalización que realizan los medios de comunicación y los periodistas, poniendo en evidencia posibles delitos como el narcotráfico y la corrupción, que además vinculan a autoridades gubernamentales.

Sobre el trabajo de los medios gubernamentales, dijo que éstos se convirtieron en vías de difusión de insultos y humillaciones hacia quienes mantienen una postura contraria al Ejecutivo.

Por su parte, el representante de Onadem, Erick Torrico, manifestó que se debe consolidar la “ética periodística desde la técnica”; es decir, mejorar la capacidad de los periodistas, a partir de una orientación, “para que éstos puedan apuntar a un trabajo investigativo, mas allá del declarativo y de esta manera no basar la difusión de la información a partir de una sola fuente”.

Durante el debate se abordó el tema de las redes sociales como fuente de información y de difusión de ideas y pensamientos políticos. Según los panelistas el uso de Facebook o Twitter no es cuestionado sino quienes buscan muchas veces el anonimato para lanzar criterios que no son veraces. Sobre el último caso, en el que el empresario y político Samuel Doria Medina lanzó una denuncia por una supuesta paternidad del presidente Evo Morales con una menor de edad, Vargas dijo que se está tapando un caso de mayor gravedad que la polémica generada en la red social y es el embarazo de una menor de edad, situación que amerita una investigación.

En la 17 versión de la Feria del Libro dos textos llamaron la atención del público y que tienen que ver con los medios de comunicación.

La mañana después de la guerra de Boris Miranda, hace un relato de las jornadas de 2008 que el Gobierno bautizó como el “golpe cívico - prefectural”. Según el autor, hubo errores de cálculo político en la denominada media luna de los prefectos del oriente que definieron su derrota e incluso se llegó a esbozar figuras como el separatismo.

Otro texto comentado fue La verdad secuestrada, escrito por el exministro de Gobierno, Sacha Llorenti, quien hace una recopilación de titulares de prensa del último tiempo y expone un cuadro sobre la propiedad de los medios privados. La exautoridad hace énfasis en el tratamiento sobre la represión de Chaparina, pero no cita su responsabilidad en los hechos.