Enfrentamientos entre jóvenes de los barrios populares de Amiens, en el norte de Francia, y las fuerzas policiales en la noche del lunes y la madrugada de ayer, han dejado 16 agentes antidisturbios heridos e importantes daños materiales.
Los disturbios se iniciaron el lunes tras un control policial durante la celebración de un entierro y las autoridades han abierto una investigación para esclarecer los hechos. El presidente de Francia, François Hollande, que ayer cumplió 100 días desde su llegada al poder, envió a su ministro del Interior, Manuel Valls, a la ciudad para decir “que el Estado movilizará todos sus medios para luchar contra esta violencia”. Amiens es un destino turístico por su centro histórico y cuenta con 140.000 habitantes, publicó EL PAÍS.
Un centenar de jóvenes de los barrios del norte de Amiens empezaron a enfrentarse a los agentes policiales sobre las nueve de la noche del lunes. Los grupos juveniles atacaron con tiros de postas, petardos y piedras, según la prefectura de policía de la región de Somme.
El origen de los disturbios en este distrito deprimido de Amiens-Norte, donde viven 16.000 personas y que registra una tasa de desocupación cercana al 45% (se dispara a los dos tercios entre los jóvenes), ocurrió durante un control policial cuando se estaba celebrando una cena de duelo por la muerte de un joven de 20 años, fallecido el jueves en accidente de moto y enterrado el sábado.
Los sindicatos policiales sostienen que unos agentes pidieron a un conductor que se detuviera y ante su rechazo le siguieron y fueron a detenerle. En el momento de pedirle la documentación, un grupo de unas 40 personas se enfrentó a los agentes y empezaron los choques violentos.