Cuarta vez consecutiva

Francia dominó ayer a Uruguay pero no consiguió plasmarlo en un marcador que no se movió (0-0) en el partido amistoso que sirvió de estreno, más bien decepcionante, como responsable del banquillo francés para el antiguo internacional Didier Deschamps.

El encuentro, que sirvió de preparación a Deschamps y a su equipo para la ronda de clasificación del Mundial de 2014, fue el cuarto enfrentamiento sucesivo de ambas selecciones que termina con empate a cero.

Ribéry por la banda izquierda, Valbuena por la derecha, Evra y, en menor medida Benzéma -sustituido en la segunda parte- fueron los que plantearon más peligro a la defensa uruguaya.

Los uruguayos protagonizaron pocas jugadas de peligro para la portería francesa en la primera etapa, la mayoría fruto de rápidos contraataques en los que sobresalió Forlán.

En la segunda, con menor desventaja en el control del balón y con nuevas acciones rápidas de los uruguayos, comprometiendo a la reacción de la defensa francesa.