Cartonbol genera dudas sobre su rentabilidad

Oruro, (EL DIARIO).- La empresa del Estado, Cartones de Bolivia (Cartonbol), dependiente del Servicio de Desarrollo de las Empresas Públicas Productivas, genera más dudas sobre su rentabilidad económica, porque hasta la fecha, después de dos años de iniciadas las actividades, aún no muestra ingresos como para garantizar su funcionamiento.

El diputado del Movimiento al Socialismo (MAS), Ever Moya, es uno de los más críticos de ese proyecto, que funciona en la zona Este de la ciudad de Oruro, a 4 kilómetros a un costado del camino a Vinto. “Nadie garantiza una rentabilidad económica y hay muchas dudas al respecto”, dijo ayer en la audiencia efectuada en la Brigada Parlamentaria de Oruro.

La presidenta del Servicio de Desarrollo de las Empresas Públicas Productivas, Patricia Ballivian, que llegó ayer a esta capital, explicó las supuestas bondades de Cartonbol, pero no pudo señalar con objetividad los ingresos y egresos, sino únicamente advertir que como empresa nueva tiene que seguir trabajando, hasta lograr los resultados que todos están esperando.

“Los ingresos están mejorando”, dijo. Consideró que, en los próximos meses, cuando haya mayor demanda de cartones, se podrá lograr una rentabilidad, de acuerdo a las previsiones que tiene el Estado.

El diputado Moya, sin embargo, insistió en que las respuestas no son claras y no permite garantizar un equilibrio entre los ingresos y los egresos y que en este momento está generando pérdidas económicas para el Estado, al margen de los problemas sociales que significa la contratación del personal que tiene la empresa.

“En la medida en que siga funcionando la empresa, se conseguirá mejorar los ingresos”, expresó Ballivian. En forma insistente, reiteró que no se puede exigir rentabilidad a una empresa, si la empresa se encuentra “en los márgenes de lo previsto y que los resultados se verán en unos cuantos meses más”.

Según el informe del Ministerio de Transparencia, también existen algunas supuestas irregularidades en el proceso de contratación directa de la maquinaria para la planta de Cartonbol, donde aparentemente el exviceministro de Mediana, Gran Empresa e Industria, Eduardo Peinado Rivera, habría favorecido la contratación de la empresa EWM, para la provisión de esa maquinaria.

Según ese informe, EWM ofreció 19.2 millones de bolivianos para la provisión de maquinaria y la empresa Shenzhen Vicstar ofertó 14.8 millones de bolivianos, sólo en maquinaria, generándose, por lo mismo un daño económico de casi 5 millones de bolivianos. Este caso se encuentra en investigación en el Ministerio Público, en La Paz.

Según Ever Moya, la instalación de la empresa demandó más de 53 millones de bolivianos hasta el momento y no se ha recuperado ni siquiera una mínima parte y que, por lo visto, se tardarán varios años para recuperar esa inversión efectuada.

“Las explicaciones de la presidenta de las empresas públicas de Bolivia, Patricia Ballivián, no han satisfecho las expectativas, para conocer las condiciones económicas en que se encuentra especialmente la empresa instalada en Oruro, como es Cartombol”, dijo el diputado Moya, uno de los parlamentarios oficialistas que empezó a criticar el funcionamiento de esa empresa.

“Yo tengo los documentos sobre las inversiones efectuadas y la recuperación económica no satisface hasta el momento a las expectativas que tenía el pueblo de Oruro”, afirmó el parlamentario.

Consideró que hay muchas dudas, que no pueden pasarse por alto, si se trata de defender los intereses del departamento de Oruro, tampoco puede competir con otras empresas similares que en forma privada están en funcionamiento.

Según Patricia Ballivian, “aún es poco tiempo para conseguir esos resultados, pero la empresa Cartonbol está en los límites de lo previsto”, insistió.