La columna

HACEN QUEDAR MAL

“Algunos alcaldes y algunos ministros siento que no ayudan”, dijo Morales Ayma el domingo acusando al ministro de Medioambiente de haberle mentido porque no había agua en Uyuni. Lo que no conocía el mandatario es que el agua no brotaba por los grifos cuando él llegó, porque las extremas temperaturas bajo cero congelaron el líquido. Apresurado o motivado por las bases, la primera autoridad del país inmediatamente pidió la renuncia de Quispe Quenta sin percatarse de estos datos que sus colaboradores olvidaron explicarle.

REDES SOCIALES

En las redes sociales ya se debate sobre el asilo concedido al australiano Julian Assange y se compara su caso con el senador Roger Pinto. Los pro-masistas son recalcitrantes y niegan cualquier relación entre ambos porque uno es “portavoz de la verdad contra el Imperio” y el otro un “vulgar delincuente”. En tanto, los cuates de Convergencia santifican a Pinto y exigen el salvoconducto para ambos personajes. Sin embargo, nadie repara en debatir, analizar o indagar las repercusiones judiciales de esta figura (asilo) dentro del ámbito de los derechos humanos. Los internautas caen, entonces, en politiquería sin fundamento.

CIDOB RETORNA

La Cidob volvió, después de dos años, a ser protagonista en la agencia gubernamental de información. Con la posesión de la directiva paralela a la cabeza de Melva Hurtado, el Ejecutivo ya utiliza a la Cidob como fuente informativa para acusar a la dirigencia de la novena marcha indígena y la problemática del Tipnis. Como recurso informativo es válido, sin embargo, deja muchas dudas sobre su objetividad en un panorama donde se cuestiona a otra agencia noticiosa de influencia católica.

ZAPATOS ROTOS

El exalcalde de La Paz, docente universitario, propietario de medios de comunicación y dirigente político, Julio Mantilla Cuellar falleció el fin de semana. La noticia se divulgó recién ayer y causó pesar en la paceñidad. Conocido como el “zapatos rotos”, nombre de una popular canción de los Náufragos de aquella nueva ola de los años 70, fue aliado del fallecido compadre Palenque y luego se reveló contra éste tras su paso por el poder. Se dedicó a dirigir una radio emisora en amplitud modulada y luego a la docencia. Su carisma superó muchas veces su gestión y el clásico tema quedó como su apodo coloquial.

UNAS CUANTAS MULAS

Las autoridades encargadas de coordinar la llegada de los presos indultados por el Gobierno de Chile se refirieron a estos ciudadanos bolivianos como personas que fueron engañadas por el capitalismo del narcotráfico, cayendo en sus redes como portadores de paso, muchas veces sin saberlo. “No son peligrosos, son unas cuantas mulas”, dijo una autoridad que luego se dio cuenta de la connotación de sus palabras. Y es que se denominan “mulas” a aquellas personas que el narcotráfico usa para trasladar la cocaína de frontera en frontera y en muchos casos los implicados son humildes a quienes se les dice “este paquetito nomás hay que llevar”, sin saber que la ley o la muerte espera al cruzar aquel confín.