Periodismo boliviano rechaza la denuncia por supuestos delitos de orden público y reitera su respaldo a la libertad de expresión.
El Gobierno presentó una denuncia de orden público ante la Fiscalía contra tres medios de comunicación por el caso de las declaraciones del presidente Evo Morales cuando hizo referencia a la labor agrícola que se desempeña en el oriente boliviano. Las amenazas se fundamentan en supuesta incitación al racismo y discriminación y apelan al Código de Procedimiento Penal.
La prensa boliviana ha reaccionado rechazando este tipo de amedrentamiento y los representantes sindicales reiteran su respaldo a los medios de comunicación y la libertad de expresión.
El encargado de dar el anuncio fue el viceministro de Coordinación Gubernamental, Javier Baldivieso, quien en conferencia de prensa dio lectura al requerimiento presentado por Juan Zurita, jefe de la Unidad de Gestión Jurídica del Ministerio de la Presidencia como apersonado del ministro Juan Ramón Quintana, donde se cita a la Agencia de Noticias Fides (ANF) el periódico Página Siete y el matutino EL DIARIO.
Según Baldivieso, la nota de ANF luego amplificada por los dos medios escritos provocó “una confrontación, una desavenencia entre los ciudadanos del oriente y del occidente”.
“Nosotros como parte del Ministerio de la Presidencia y como parte de los funcionarios y servidores públicos, no podemos permitir que se distorsionen los discursos, las declaraciones que realiza el presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, porque esto de alguna manera no hace más que generar una imagen de nuestro mandatario que lo único que está generando es un trabajo constante por el bien y el desarrollo de nuestro país”, dijo.
La denuncia refiere una “probable comisión del delito de difusión o incitación al racismo o a la discriminación que se encuentra tipificado en el artículo 281 del Código Penal”, que según la autoridad debe ser aplicada, porque no correspondería acudir a la Ley de Imprenta.
La querella va dirigida a los representantes legales, editores y responsables de las notas publicadas entre el 15 y 16 de agosto, que se basaron en el discurso brindado por el presidente Evo Morales en Tiwanaku, cuando dijo que “sólo por flojos podemos hambrear” en referencia al oriente boliviano, aunque el Gobierno afirma que esta frase fue “descontextualizada y tergiversada maliciosamente”.
PRENSA BOLIVIANA
Para los representantes del periodismo nacional, estas acciones derivarán en protestas y medidas de respaldo a los medios de comunicación que hoy son afectados por querellas presentadas ante la justicia ordinaria.
El secretario General de la Federación de Trabajadores de la Prensa de Cochabamba, Félix Terán, los dirigentes de los Sindicatos de Quillacollo y Punata, Juan Carlos Bernal y José Flores Vidal, el presidente del Colegio de Comunicadores Sociales de Bolivia, Miguel García, y el presidente de la Asociación de la Prensa, Julio Veizaga, manifestaron su respaldo a los tres medios aludidos por el Ejecutivo.
“ANF, a nuestro parecer y desde el punto de vista estrictamente profesional, hizo una cobertura de las declaraciones del presidente Evo Morales en Tiahuanaco con veracidad y apego a los hechos. No hay tergiversación, manipulación, calumnia o difamación en la cobertura noticiosa; eso lo sabemos los profesionales, en tanto que el Gobierno lanza amenazas políticas para sentar la mano a la prensa nacional”, manifestaron.
A su turno, el ejecutivo de la Federación de Trabajadores de la Prensa Santa Cruz, Roberto Carlos Hurtado, manifestó su rechazo al proceso que anunció el Gobierno y anunció que los trabajadores del gremio en la capital oriental están dispuestos a realizar medidas de protestas.
“Vemos una actitud de querer amedrentar a los medios de comunicación a todos sin excepción televisión, radio, periódicos, medios en línea y todo aquel que quiera opinar distinto al gobierno central. Se pretende judicializar la información y la libertad de expresión”, declaró.
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