Proliferación de inútiles reuniones “cumbres”

Desde hace algunos años el Gobierno ha estado convocando a sectores sociales y políticos a reuniones “cumbres” con objeto de tratar asuntos de supuesta importancia, convenciones que, pese a los altos gastos, derroche de publicidad y oferta de grandes soluciones no han tenido resultado visible.

Por si fuera poco, para los próximos meses, autoridades estatales están citando a nuevos actos de ese tipo con el anuncio previo de que servirán para que sectores populares, movimientos sociales y profesionales analicen los graves problemas que enfrenta el país y propongan soluciones, de tal forma de sacar a los medios oficiales de la falta de iniciativas que padecen y pareciera que se encuentran en un callejón sin salida.

Entre otros casos, el año pasado en Cochabamba se efectuó la “cumbre del cambio climático” y enseguida la “cumbre de los movimientos sociales”, cónclaves que se sumaron a varios anteriores que fueron realizados en otras ciudades, donde se movilizaron dirigentes de diversos grupos sociales y que aparecieron en la prensa con gran despliegue de fotografías, ofrecimientos y promesas, pero principalmente de apoyo al Gobierno.

El caso más notable de estas “cumbres” fue realizado en dos etapas en Tiquipaya (Cochabamba), donde participaron los llamados “movimientos sociales”, con el objetivo de “profundizar el proceso de cambio” y orientar al país en la vía del “socialismo”. Esa reunión contó con la presencia de más de 500 delegados, deliberó varios días y emitió notables proposiciones, aunque de orientación contraria a la que esperaban sus auspiciadores.

Se informó que esas propuestas serían consideradas y aprobadas por los órganos Legislativo y Ejecutivo, pero, finalmente, todo lo acordado quedó en el más profundo olvido (igual que en otras “cumbres”) y no se volvió a emitir una sola palabra sobre los asuntos sugeridos, por lo cual se puede considerar que esas reuniones fracasaron en forma rotunda.

En la actualidad nos encontramos frente a la realización de nuevas “cumbres” que, por los antecedentes indicados, podrían terminar en la misma forma que las anteriores. Al respecto la “cumbre de la salud” ha encontrado oposición, ha sido diferida y no se sabe dónde se va a realizar. Otra “cumbre”, de los transportistas, probablemente será la única “exitosa”, pues los choferes aumentarán una vez más el precio de los pasajes.

Pero la reunión más importante que se avecina será la “Cumbre de presidentes del ALBA” que ha propuesto el presidente Evo Morales para que se efectúe en Oruro cuando termine su gestión de gobierno. Este sabio concilio deberá considerar asuntos trascendentales y que, sin contar con los ingentes gastos que significará, podría terminar como las otras cumbres que ha observado el pueblo con gran asombro.