Los osos Liya (i) y Nelson (d) juegan en su corral del parque Mundo Acuático en la Costa Dorada de Brisbane (Australia). Los cuidadores de estos animales trabajan para lograr la reproducción de la especie, por lo que han creado, incluso, una piscina con sardinas con la esperanza de crear las condiciones descritas en la novela erótica del autor británico “Cincuenta sombras de gris”. El calentamiento global pone en peligro la existencia de los osos polares porque su hábitat está siendo afectado por el deshielo que avanza sin parar cada año.