Desde la fundación de la República observamos, en dictadura y democracia, falencias que tanto daño nos hicieron. Empero no fuimos capaces de asumir una actitud tendente a salir del atraso y lograr la prosperidad que tanto anhelamos.
En este marco Bolivia, enclaustrada por la acción artera del invasor, invoca la concurrencia y la participación de los ciudadanos, orientales y occidentales, citadinos y rurales, para impulsar un proyecto de envergadura a fin de acabar con la postración de siempre, aprovechando, ahora más que nunca, la solidez de la economía nacional, que es resultado de los elevados precios de nuestras materias primas en mercados internacionales.
En consecuencia, los bolivianos estamos conminados a ratificar, ante la historia y los hombres, la madurez política que hemos alcanzado desde 1982, desechando la demagogia y emprendiendo actividades de gran responsabilidad por el bien de la Patria y en lo posible obviando resabios que nos confrontaron, dividieron y postergaron. Por lo visto hay que deponer las manifestaciones beligerantes de tipo personalista o sectario con la perspectiva de corroborar nuestra inquietud de servicio a favor de la Patria y la ciudadanía que clama, permanentemente, un venidero mejor. Tenemos que munirnos de coraje, imaginación y audacia política para lograr días llevaderos, con justicia social y oportunidades para todos, sin discriminaciones.
Verdaderamente quienes nos cobijamos bajo la sagrada tricolor, orientales y occidentales, citadinos y rurales, empresarios y trabajadores, debemos ayudarnos mutuamente, como bolivianos de esencia, despojándonos de regionalismos u otros prejuicios sociales. Asimismo es necesario vigorizar el sentimiento de Patria, de nación y pueblo, suprimiendo el encono, la antipatía y el revanchismo, males que envenenaron y envenenan aún el alma nacional.
Que la cruzada patriótica que debemos emprender, de manera inmediata, sea impulsada por el propósito de dignificar a los bolivianos, con la recuperación de la Patria, subyugada por intereses externos. Con esto queremos significar que los recursos naturales estratégicos, tan requeridos fuera de nuestras fronteras, retornen al seno del Estado, en beneficio de la ciudadanía, dejando de lado a fuerzas extrañas que no han cesado de vaciar las entrañas de la Patria.
En suma: los bolivianos debemos superar, o por lo menos tratar de superar, los resabios y resquemores del pasado que nos han dividido, confrontado y “enguerrillado”, en desmedro de los intereses nacionales. Es imperioso que asumamos acciones conjuntas, de unidad, en busca de la prosperidad nacional, con justicia social.
Usurpado el 7 de octubre de 1970, por defender EL DIARIO |
Dirección:
Antonio Carrasco Guzmán
Jorge Carrasco Guzmán Consejo de Administración:
Miguel Lazo de la Vega |
Ernesto Murillo Estrada |
Rodrigo Ticona Espinoza |
"La prensa hace luz en las tinieblas |
Portada de HOY |
Caricatura |