Atienden desde las seis de la tarde hasta las seis de la mañana, su horario convierte el lugar en punto final del trajín de festejos nocturnos.
En la avenida Simón Bolívar se constituye un antiguo y tradicional lugar en la ciudad denominado, por la ciudadanía paceña, “Las Velas”. Se trata de un pequeño mercado donde las comerciantes expenden alimentos, durante toda la noche, logrando convertir a este punto en un lugar de encuentro para los paceños, luego de la media noche.
El mercado Las Velas atiende desde las seis de la tarde hasta las seis de la mañana, su horario lo convierte en el punto final del trajín de festejos nocturnos que acostumbran realizar algunos ciudadanos, las vendedoras recuerdan que muchos artistas, personajes políticos, ciudadanos de todas las edades, asisten a este singular mercado a compartir una comida tradicional acompañado de refresco o si prefieren una cerveza fría.
Antiguamente se llamaba Mercado Zalles eran unas chiwiñas alumbradas por mecheros y velas ubicado casi en frente del Estadio. Hace aproximadamente 30 años se trasladaron a la avenida Bolívar y los compradores lo bautizaron cono “las velitas”.
Julia Morales de Salinas, vendedora del mercado en diálogo con EL DIARIO recordó con nostalgia los tiempos en que las vendedoras se trasladaron desde la pampa del estadio, a lo que entonces era un cenizal.
Aproximadamente hace 40 años, 56 vendedoras de la pampa del estadio fueron trasladadas a un cenizal donde ahora esta ubicado el mercado de Las Velas, “con chiwiñas y mecheros vendíamos en la noche, encima del barro que había en el lugar, “aquí hemos sufrido mucho porque no teníamos un techo, la lluvia nos mojaba, cuando hemos venido a vender aquí esto era un cenizal y estaba lleno de barro”, nosotros hemos tenido que limpiar todo, la construcción no era como ahora, hemos sufrido bastante, sin luz, con bastante frío y la gente mal entretenida que siempre rondaba la zona” lamentó
Es una de las vivanderas pioneras en la pampa del estadio, hace 60 años. “Este trabajo ha permitido que mis hijos puedan salir adelante y estudiar y hoy con orgullo puedo decir que mi esfuerzo valió la pena porque mis retoños están en otro país saliendo adelante” dijo.
Julia recordó “A mi puesto vino el general Hugo Banzer Suarez, tengo caseritos que los conocí niños y jóvenes hoy son padres de familia y amigos que viven a compartir con nosotros”, dijo.
La mayoría de los anaqueles se constituyeron en herencia familiar, donde abuelas, hijas y nietas continúan con el negocio. Como en toda empresa católica , no falta la fe en la virgen Del Carmen, que es la patrona y cada 6 de enero, cuando cambia la directiva, se realiza una misa y una pequeña recepción.
La comida es “rápida tradicional” como sándwich de chola, silpanchos, los chicharrones “pinta boquita” y el plato estrella los “anticuchos” (corazón de res asado a la parrilla), es recomendable comprar también refrescos pues todos estos platillos se acompañan con un picantísimo ají o llajua, si desean los comensales pueden adquirir una cerveza.
Se refirió también a que una de las preocupaciones que la envuelven es que falta seguridad, porque a veces tiene que luchar con las personas que llegan al mercado y al estar embriagados pueden ocasionar problemas y riñas entre ellos, “tenemos que intervenir cuando se pelean”, lamentó..
Morales aprovechó la visita de EL DIARIO para pedir a las autoridades municipales la refacción de la infraestructura actual que tiene muchas goteras, “ya empieza la época de las lluvias y seguramente vamos a tener muchos problemas, porque soportamos inundaciones. Por eso pedimos al Alcalde que no se olvide de nosotros ya que somos un mercado mundialmente conocido” finalizó.
OPINIONES
Carlos Durán:
“Hace muchos años yo vengo al mercado Las Velas, es un espacio singular donde podemos servirnos alimentos frescos y también encontrarnos con algunos amigos. Creo que las autoridades deberían mejorar un poco la infraestructura porque ya son muchos años que funciona el mercado y ya está un poco rústico y pequeño que algunas veces da un mal aspecto, las caseritas trabajan mucho y creo que merecen una remodelación. La atención de las vendedoras hace que los comensales regresemos, soy cliente hace unos 20 años aproximadamente, he probado todo lo que nos ofrecen”.
Fernando Cossio:
“Recuerdo que a este mercado vengo desde muy joven creo que tenía 13 años o más pero la atención y la comida hace que no deje de asistir con mi familia y amigos. Este es un lugar tradicional de encuentro de amigos donde podemos hallar comida muy rica y a altas horas de la noche, así considero este espacio popular, la gente es muy amable y la comida es muy rica. Pienso que al ser éste un comedor tan concurrido y tradicional de La Paz debería mejorar un poco su aspecto de infraestructura, baños y mayor espacio para las vendedoras creo que darían un mejor aspecto a este bonito lugar.”
Luis Fernando Clavijo:
“Vengo a este mercado ya hace 40 años la comida es muy buena, creo que hasta cierta hora es oportuno disfrutar de lo que realmente ofrecen acá en el mercado, porque ya en la madrugada creo que es un poco peligroso. La atención es la misma por eso vengo a este mercado. Como ciudadano creo que debería ampliarse a una planta más. Me gustaría que las autoridades les den comodidad a las vendedoras y comensales porque ésta es una tradición, la infraestructura se ha remodelado pero debería ser mejor, invito a la población a que disfrute del famoso mercado Las Velas”.
Boris Sanjinés:
“Tengo muchos recuerdos de lo que fue la transformación de Las Velas, felicito a las comerciantes pero veo que existen muchas falencias que perjudican a los comensales, a veces estamos comiendo y está choreando las gotas de agua, deberían limpiar un poquito, asimismo, considero que la Alcaldía debería fumigar de forma general. Las comidas son ricas y apetecibles además que son al día, estoy acostumbrado a comer silpancho, chicharrón, y sándwich de chorizo, creo que una mejora a la infraestructura haría perfecto este espacio tradicional”.
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