En una ceremonia ancestral andina en las ruinas de Tiwanaku, el vicepresidente Álvaro García Linera y la presentadora de televisión Claudia Fernández unieron sus vidas.
Entre los principales invitados se encontraban el presidente Evo Morales, los legisladores del oficialismo y los condecorados como Premio Nobel de la Paz, el argentino Adolfo Pérez Esquivel y la guatemalteca Rigoberta Menchú.
El regalo del mandatario a García Linera, provocó sonrisas entre los asistentes, ya que se trataba de un “marsupio” o cargador para bebés. Por su parte, los novios compartieron el ají de fideo prometido y obsequiaron como recuerdo a los invitados un plato de barro, con las iniciales “C y A”, grabadas.