“Evadimos la prensa porque no hemos aprendido a convivir con ellos”

La senadora orureña por el Movimiento Al Socialismo (MAS), Sandra Soriano, en entrevista con EL DIARIO, develó detalles del carácter del presidente Evo Morales, habló sobre sus sueños, aquellos realizados y algunos que nunca pudo alcanzar y de las dificultades que vivió en su vida como dirigente sindical.

¿Cómo llegó a la vida política?

Trabajando como abogada de la COB, ayudando a los trabajadores de base de obras en sus conflictos a pedido del presidente Morales y de las organizaciones con las que trabajaba; (luego) se me invita a ser la primera senadora por Oruro, además fui proclamada por una marcha de varios sindicatos.

¿Cuál fue su mayor dificultad en la vida sindical?

Era pelear contra la lógica de un cierto machismo, en un círculo donde se decía que las mujeres teníamos acceso, pero no era así. Se desvaloriza mucho nuestro trabajo. Una mujer tiene que ganarse el respeto por mérito propio. Además, tenía la confusión, entre ser mamá, esposa, profesional, sin haber tenido las posibilidades para hacer una maestría o doctorado.

¿Cuál es su mayor deseo para el país?

Deseo que todos los bolivianos lleguemos a ser conscientes de que debemos trabajar, no podemos esperar que sean las autoridades las que construyen el país, todos somos responsables de nuestro destino.

¿Cree que el presidente Evo Morales ha mantenido su popularidad?

Sí, porque el pueblo en el área rural, se acerca a él, le reclama y se siente cerca del presidente y él se siente como uno más de ellos. Nuestro presidente tiene un carisma, que no siempre entendemos. Hemos estado acostumbrados a otro tipo de gobernantes que estaban muy alejados del pueblo. Él rompe con todos los prototipos de mandatarios.

¿Alguna vez vio al Presidente preocupado o deprimido?

Sí, en varias ocasiones por cosas que pasaban en el país, pero tiene una formación muy diferente. No es de los que se preocupan, es de los que se ocupan. No se queda con la idea de que algo no se puede hacer. Pareciera que siempre sabe qué hacer ante cualquier problema, pese a que no tiene la formación académica.

¿Considera que el Presidente es misógino como ha sido calificado?

No, el Presidente reconoce la labor de las mujeres. Lo que se ve como ofensa, es malinterpretado. Si no fuera por él, las mujeres no estaríamos como dirigentes, senadoras o diputadas. Es como el padre de todas nosotras.

¿Qué piensa de sus constantes ataques a la prensa?

El presidente tiene una virtud y es que es demasiado sincero. Esa actitud es malinterpretada. Se piensa que ataca a los periodistas pero en realidad cuestiona a los dueños de los medios, Los trabajadores de la prensa son como los hijos en medio de un conflicto familiar.

¿Qué piensa de la labor de los medios de comunicación?

Tengo un gran respeto por los periodistas porque entienden de todo, son expertos en tantos aspectos a la vez. Tienen que manejar muchos términos y conocimientos que entienden sólo los técnicos. Es una labor muy sacrificada.

¿Por qué los asambleístas a veces evitan a la prensa y no son accesibles?

Porque sentimos que los periodistas nos quieren tomar un examen, tenemos miedo porque no hemos aprendido a convivir con ustedes y a veces preferimos evadir a la prensa. Esa misma sensación la tiene el Presidente.

¿Cómo evalúa a los sectores políticos de oposición?

Tenemos una oposición muy débil, nada propositiva, queremos construir con ellos, pero no están acordes al reto. Todavía priman en ellos intereses privados, particulares, aún creen que puede volver a la vieja forma de política.

¿Qué le falta al Gobierno?

Le falta apoyo de la clase media, que entienda que todos somos iguales, sin etiquetas. Que sean parte de la construcción del país que queremos.

PERFIL

Sandra Soriano es orureña y vive en comunión con su actual pareja Jorge Orgaz, con quien se unió en un rito andino en la región de Copacabana, hace ocho años.

Tiene una hija, estudiante de derecho, Alejandra, de 21 años, fruto de su primer matrimonio. Su esposo es comunicador social.

Es abogada de profesión y trabajó de manera independiente, hace 26 años. Se graduó de la Universidad Técnica de Oruro

En sus tiempos libres, disfruta de las manualidades. Diseña y elabora joyas artesanales y transforma la ropa a su propio estilo.

Siempre quiso ser carpintera o modista. Le gusta bailar morenada y diablada.

Encontró en la Santa Biblia, la paz y la formación para su vida personal y familiar.