Problemas económicos y sociales derivan en abandonos de hogar

Muchas madres deben afrontar el abandono y luchar por sacar adelante a sus familias, en especial cuando sus hijos son pequeños.


En El Alto y las provincias, muchas mujeres se ven obligadas a tomar las riendas del hogar para sacar adelante a sus hijos, esto frente al abandono de sus parejas, en especial jóvenes, que no pensaron en las consecuencias y prefirieron huir de su responsabilidad.

“Cuando era niña la única preocupación era sacar a pastear el rebaño y algunas veces jugar, jamás se hubiera imaginado tener que cargar con tanta responsabilidad de mantener un hogar sola”.

Domitila a sus 19 años decidió establecer una relación con un muchacho de su misma edad. Debido a la poca información que existe para las adolescentes de su edad, sobre todo en las áreas rurales, la sobreprotección, hizo que quedara embarazada, ante tal situación su pareja decidió abandonarla. Como en muchos casos, la joven se quedó sola, lo único que le acompañaba eran las críticas de los comunarios por el hecho de ser madre soltera.

Al verse presionada por su entorno y tras el consejo de una amiga, decide dejar su hogar para buscar mejores condiciones de vida en la ciudad de El Alto. La suerte no siempre está de su lado, pero tiene que ingeniárselas para llevar el alimento a su bebé, es rechazada en muchos hogares porque no la aceptan con su hijo y no puede encontrar un trabajo digno.

Otra historia similar es la vivida por Sonia, una mujer que tiene en el rostro los signos visibles de la tristeza. Una muchacha humilde que transita con su bebé cargado en su aguayo, tiene 21 años, estatura mediana (1,50 aproximadamente), cabello negro, delgada, de tez morena, ojos claros y las cicatrices en su rostro a causa de los golpes recibidos por su pareja.

Actualmente se gana la vida vendiendo caramelos en microbuses como ambulante, llegó a la ciudad de El Alto procedente de la provincia Manko Kapac, en busca de una mejor oportunidad para ella y su hija. Vive alojada en su domicilio de uno de sus parientes y asegura que todo sería más fácil si la pena fuera compartida con Celestino, su expareja.

Celestino era el joven a quien ella había entregado su corazón, pero, como a la mayoría de las muchachas provincianas, aquel muchacho había entusiasmado el amor de Sonia con la promesa de un futuro mejor, pero, al contrario, se fue para no volver.

El número de madres solteras se ha incrementado en un 20 %, según afirma Jorge Salazar, oficial de Registro Civil. “De los muchos niños que son inscritos mensualmente, por lo general, la madre no declara quién es el padre y los inscriben como hijo natural”. Otro tanto, viene a averiguar si la persona con la que están conviviendo, estaba casada o no, las que confirman sus sospechas simplemente se quedan asombradas y se aguantan.

“Otro tanto son los casos que se presentan en muchachas entre 14 y 16 años quienes no concluyen sus estudios y se dedican a hacer sus familias y cuidar a sus bebés, sin contar con una pareja estable”, agrega.

A esto se suma la decepción de los padres, quienes retiran el apoyo moral a sus hijas asegura la psicóloga Ninoska Ticona, estas situaciones provocan inseguridad y sentimientos de culpabilidad, debido a esto, las jóvenes dejan sus familias, llegan a la ciudad y aquí es donde quieren encontrar una respuesta a sus dudas, pero es difícil cuando psicológicamente no han superado traumas anteriores asegura.

Por su parte, el abogado Franz Ariñez asegura que, como Sonia, seis de cada diez mujeres, sean de provincia o ciudad, son abandonas por sus esposos, novios o concubinos, de los cuales, la mayoría de los casos son por embarazos no deseados o engaño a la pareja. Y un mayor número de éstas, se quedan calladas o simplemente se conforman con un reconocimiento de sus hijos por parte de su pareja.

Lo bueno en muchas mujeres, afirma Ticona, es que ellas dejan pasar estas malas experiencias y deciden continuar su camino, no es difícil, pero tampoco es fácil, se requiere de mucha voluntad e incentivo.

Salir adelante, después del engaño de tu pareja, es difícil, pero no imposible, afirma Lupe, vecina de la zona de Buenos Aires. “A veces una piensa que es la culpable de todo lo que sucede, pero hay que darse de cuenta que no es así y lo más importante está en superarlo”.

“Tengo dos años separada de su pareja, él me engañó con otra mujer, se ha ido y me ha dejado con mis tres hijos, pero son los hijos por los que tengo que luchar, para ellos trabajo, yo tuve que hacer de papá y mamá a la vez”, sostiene.

Al respecto, la psicóloga Ticona asegura que la fuerza de una mujer está implícita dentro de cada una, no es fácil terminar una relación que ha durado varios años pero existen varias maneras de superarlo, el deporte, el trabajo, la familia entre otras. Muchas mujeres sólo prefieren olvidar pero no es cuestión de esquivar el problema sino de enfrentarlo de la mejor manera, no dejándose morir ni intimidar.

“Para esto, muchas veces se requiere de ayuda psicológica, pero si una no tiene la predisposición, nada se logra. Lo primero es tener el deseo de salir adelante, por otra parte el estado tiene que jugar un rol muy importante para frenar este tipo de casos, ya sea en los colegios educativos orientando sobre la familia”, añade.

 
Revistas
Publicidad
Portada de HOY

JPG (696 Kb)      |      



Cotizaciones
1 Dólar:6.96 Bs.
1 Euro:9.00 Bs.
1 UFV:1.77883 Bs.

Publicidad