¡Doctor, Gracias por todo!

Ayer nos dejó el Dr. Remberto Echavarría Pozo, un potosino de pura cepa, nacido en la población de Puna un 2 de Octubre de 1932.

Por los años 60, gracias a los avatares caprichosos del destino, encuentra el escenario ideal para que su eterna pasión se desarrolle de una manera grandiosa en la gran ciudad, casi por casualidad.

En el Colegio Sagrado Corazón el profesor de química, Francisco Cerro, reconoció siempre las cualidades innatas del Dr. Echavarría, conectó un amplificador a unos megáfonos en el patio donde se disputaban los partidos intercursos, Remberto se puso al frente y se transformó en el relator oficial del colegio, ganándose la admiración de todos sus compañeros y profesores. Era muy chico, tenía 14 años, pero con una pasión de gigante.

Como todos sus contemporáneos, admiraba al relator de todos los tiempos, el maestro “Fioravanti”, quien desde Buenos Aires marcó con su estilo y particularidades de la escuela Rioplatense a todos los relatores en Latinoamérica. Hasta el día de hoy, en los albores del siglo 21 muchos relatores continúan con el sello de quién fue un pionero en este rubro.

Cuando cursaba el quinto año de secundaria se hizo cargo de deportes en Radio Potosí, con Humberto Zambrana. En esta radio relata su primer partido oficial, los rivales fueron 10 de Noviembre y Hiland Players, quienes empataron 2 a 2, partido que con mucho cariño guardó siempre en su corazón.

Estando en segundo año de abogacía se casó y un Enero de 1958 se graduó en la Universidad Tomás Frías como flamante abogado, obligado a trasladarse a la ciudad de La Paz para validar su título ante las autoridades nacionales. En ese ínterin como buen y reconocido falangista juvenil recibe la invitación de Don Gastón Velasco, por ese entonces alcalde de la ciudad para trabajar como abogado. Para llegar al alcalde recurrió a don Cucho Vargas que aquellos años tenía el programa más escuchado en el éter llamado “La Verdad está en la cancha” Don Cucho sabía que Don Remberto relataba en Potosí y lo invita a relatar el partido preliminar en un cuadrangular donde partcipaban Bolívar, The Strongest, Atlanta y Rosario Central de Argentina, como buen gustoso del fútbol Argentino se sabía casi de memoria las alineaciones de todos los equipos; esa tarde causó sensación no sólo entre la afición sino en los jugadores de los equipos gauchos que pensaron que “Fioravanti” había llegado a La Paz para relatar este torneo, cuando fué el Dr. Echavarría quien lo había hecho. A este programa al poco tiempo se incorpora un argentino de Rosario con nombre de italiano inconfundible… Lorenzo Carri. De la noche a la mañana “La verdad está en la Cancha” quedó bajo la dirección y relato de don Cucho Vargas, el Dr. Echavarría también en el relato y el comentario de Lorenzo Carri, el productor de este grupo fue Don Luis Lazarte… un equipo de lujo que por 5 años provocaron las delicias de una audiencia total a nivel nacional incluido el Sudamericano del 63 con Bolivia campeona.

Luego del Campeonato Sudamericano y ya con la presencia de su hermano Gróver, deciden independizarse; junto a una de las voces mas preciadas y galantes de la época,la de Don Jorge Hoffman, fundan “Radio Deportes”. Gracias a la visión y buena voluntad de Alberto Méndez propietario de “Radio Méndez” salen al aire, el mecenas y padrino dueño de la radio no les cobró durante 8 meses hasta que consiguieran auspiciantes. Radio Deportes fue el único programa radial que esos años logró integrar una cadena de 40 emisoras a nivel país. Medio siglo frente a los micrófonos le permitieron ganar infinidad de amigos como el legendario José María Muñoz en Argentina o su cuate Carlos Eduardo Dos Santos Galvao Bueno en Brasil, fueron muchos los aeropuertos a los que le tocó arribar y en cada uno de ellos había un amigo que lo esperaba para estrecharle un abrazo, demostrando a lo largo del tiempo educación y comportamiento ejemplar.

Se declaró en la intimidad “Bostero” profesional, hincha acérrimo de Boca, a tal punto que el presidente de la institución Xeneize el histórico Alberto J. Armando le regaló una membresía de socio sabiendo de su cariño por “Boquita”.

Estuvo en los principales escenarios deportivos del mundo, el Maracaná, el palacio del pueblo en China, en estadios mundialistas en todo el planeta, recordaba, de manera especial, aquella final en el estadio de Munich de 1974 ente Alemania y Holanda. Esa oportunidad al finalizar el mundial lo invitan a quedarse y trabajar en Alemania, la única condición era que debía responder ese momento. Sin la posibilidad de comunicarse con su esposa y ya siendo padre de dos hijas no pudo responder y vio como se esfumaba de sus manos esa gran oportunidad. Esto lo recordaba con una sonrisa, sin rencores ni arrepentimientos, la llegada de dos hijas más colmaron su existencia junto a su compañera de toda la vida durante 54 años, una de sus hijas falleció y las otras tres se transformaron más que en sus amadas hijas en “sus mamás” como las denominaba él con mucho orgullo.

Nunca pudo superar el dolor del fallecimiento de su esposa, amiga y compañera. El deseo del Dr. Remberto Echavarría es que se lo recuerde como un hombre que sabía que no volvería nunca más a caminar por esta vida; y bajo esa perspectiva, el sueño que lo empujó a distinguirse fue el hecho de ser siempre un hombre de bien.

Estas historias, fechas, nombres, lugares y detalles los extraje de un homenaje realizado por “Las Súper Poderosas” en la última nota que el Dr. Remberto Echavarría realizó para TV. donde cuenta su vida*.

Desde las filas, con todos los compañeros de Deportes EL DIARIO, nuestro más sentido pésame a la familia y nuestro agradecimiento por haber sido, en algún momento, contemporáneo de uno de los personajes más importantes del periodismo deportivo del país.