José Luis Hidalgo, representante del Defensor de Pueblo en la ciudad de El Alto, manifestó que en los diferentes actos y talleres que realiza junto con las instituciones del orden pudo identificar la dualidad de funciones que asumen los efectivos tomando un papel de liderazgo delante del resto de la ciudadanía.
“En las charlas realizadas a los funcionarios policiales se rescatan muchas de sus experiencias y dificultades por las cuales ellos atraviesan, entre ellas las condiciones de trabajo, datos que son aprovechados para que podamos conocer en que lugares de la ciudad el maltrato es constante y ejercido por niveles jerárquicos, así como nos dan a conocer muchas actividades que deben asumir por responsabilidad moral en los lugares donde viven”, explicó.
De acuerdo con Hidalgo, más del 85 % de los efectivos policiales representa a la tropa, donde, en su mayoría, provienen de sectores populares y migrantes por lo que adoptaron dos formaciones, la urbana y la rural, las cuales deben ser asumidas en su momento con actividades policiales dentro de la ciudad que responden a las normas internas, procedimientos policiales y las Leyes vigentes, mientras que en sus lugares de origen se les inculcaron diversas facetas de los usos y costumbres donde el tema de la justicia comunitaria y los valores de la misma están por encima de las normas urbanas.
“Los policías que hacen turnos de 24 horas en las otras 24 horas, donde supuestamente deberían descansar, se encuentran realizando otro trabajo o funciones que están relacionadas a sus comunidades, juntas vecinales o a mejorar sus ingresos personales. Muchos de ellos son conductores de vehículos, comerciantes o incluso se dedican a hacer trabajos de albañilería, ellos mismos construyen sus viviendas en sus comunidades o zonas donde ellos tienen sus obligaciones, donde deben responder a sus juntas vecinales a pesar de su trabajo en el sector urbano”, aseguró.
Hidalgo asevera también que en tiempo de cosecha y siembra los funcionarios policiales deben llegar a sus comunidades a realizar los trabajos de cargos dirigenciales para que apliquen las experiencias que asumen en las ciudades donde su profesión los consolida como capacitadores de seguridad ciudadana.
“Debiera hacerse un estudio sociológico para definir el comportamiento de los policías en sus ciudades cuando ejercen su labor policial y cual es su conducta en sus comunidades o zonas”, indicó Hidalgo.
“Los funcionarios policiales o profesores urbanos ya adquieren liderazgo al llegar a ser presidentes zonales, Mallkus o asambleístas, como en el caso del representante Roberto Rojas, quien fue efectivo policial y ahora está como Presidente de la Brigada Paceña. Entonces es interesante la dinámica en la que se mueven los policías tanto en su vida profesional y la tarea ejercida en sus sectores de origen”, agregó.
Por todo ello, el entrevistado concluyó que en áreas rurales, ante la falta de presencia del Estado, los funcionarios policiales han observado que se ha perdido autoridad por diferentes razones, las cuales aún no son identificadas de manera concreta, pero se las debe superar respondiendo a las demandas vecinales.
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