Vinculación ferroviaria Cochabamba - Santa Cruz

El primer estudio sobre la Interconexión Ferroviaria Cochabamba (Aiquile) - Santa Cruz fue elaborado por el ingeniero Hans Grether, enlace que definía el trazo por Aiquile, Vallegrande, Empalme y Montero, que estaba definido en una extensión de 624 Km. Posteriormente se efectuaron otros estudios por las Comisiones Mixtas Bolivia – Brasil y Brasil - Chile en las que intervinieron técnicos de la Empresa Nacional de Ferrocarriles (ENFE).

En 1928 Bolivia y Brasil acordaron la construcción del enlace ferroviario entre Corumbá y Cochabamba; en 1938 se suscribió el Tratado sobre Ligacao Ferroviária que tuvo como objetivo el tramo Corumbá - Santa Cruz, que es el tramo que falta para completar el “corredor Ferroviario Santos - Arica” o “Corredor Ferroviario Transcontinental Central”.

En 1974 los presidentes de Bolivia y Brasil suscribieron el Comunicado conjunto, donde acordaron que el Gobierno del Brasil a su propio costo elaboraría y elaboró los estudios de ingeniería final del enlace ferroviario, con la participación de entidades y técnicos bolivianos, dado que Brasil siempre tuvo mucho interés en que se construya este enlace. Como se sabe, en la región conexa a la frontera boliviano brasileña (Matogrosso) hay dos cosechas al año, de gran producción de soya, que con mucha dificultad los brasileños exportan por el Atlántico. Por ello tiene interés en que Bolivia complete el tramo ferroviario que falta, para así poder sacar parte de su producción vía Bolivia hacia Arica o el Perú para su embarque a ultramar.

En virtud del Comunicado conjunto mencionado se entregó el estudio final de ingeniería que contiene el estudio de todos los trabajos necesarios para la realización de las obras de infra y supraestructura de la vía y la instalación del proyecto operacional, el dimensionamiento del material rodante, etc. con un costo de $us. 6.160.000.

CANAC, consultora canadiense, posteriormente realizó otros estudios con variantes a los estudios anteriores, disminuyendo el costo de la obra, pero que estaba entre los $us. 400 y 500 millones. Para poder habilitar el corredor mencionado, es necesario también efectuar estudios del tramo Oruro - Cochabamba por los frecuentes problemas de inestabilidad que hay en la zona roja.

Actualmente se tiene el propósito de efectuar nuevos estudios para el “Corredor Ferroviario Bioceánico Central”, que contenga estudios: ambiental, de diseño final y de demandas. Estos estudios definirán los tramos, y si se tomará en cuenta estudios anteriores. Se invitó a empresas nacionales y extranjeras para que hagan saber sus expresiones de interés bajo la modalidad del BID y de la información que se tiene. Varias empresas del mundo, de España, Francia, Italia, Corea, CANAC y otras hicieron conocer su interés en realizar los estudios. De estas empresas se obtendría una lista corta que servirá para que sean invitadas a participar en la licitación para dichos estudios. China también, por su parte, mostró su interés en construir este corredor, haciéndose cargo de los estudios y del financiamiento.

El autor es especialista en transportes, abogado.