El viceministro de Defensa Social, Felipe Cáceres, aseguró ayer que dos familias bolivianas, que se dedican a la ilícita actividad del narcotráfico, pugnan por el control de cuatro comunidades de la provincia Ichilo en Santa Cruz.
Las mismas habrían expandido sus operaciones y serían continuamente monitoreadas por Inteligencia de la Fuerza Antidrogas. De acuerdo a la explicación de la autoridad, en un operativo que continúa en el sector de Yapacaní, San German, Nuevo Horizonte y kilómetro 35 se logró destruir más de 50 fosas de maceración y este trabajo será sostenible por considerarse una zona “estratégica”.
“Todo lo que es San Germán, Kilómetro 35 y Nuevo Horizonte es una zona estratégica, porque está a la naciente del Parque Amboró, donde hemos detectado que dos familias se disputan la zona y están incrementando sus actividades de tráfico de drogas en el lugar y nuestras unidades de Inteligencia están detrás de estas personas”, dijo.
Según el informe del Viceministerio de Defensa Social, las carencias tecnológicas continúan afectando la labor de los efectivos de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN), razón que justificaría la no aprehensión de “peses gordos” vinculados a la ilícita actividad.
Respecto al “Estudio Integral de la Hoja de Coca”, que tiene cuatro años de demora, el funcionario afirmó que recién en marzo de la próxima gestión se conocerán los resultados finales de esta investigación debido a que dos, de los ocho componentes, aún no fueron terminados.
Asimismo, Cáceres negó que se piense en modificar o sustituir la Ley 1008, por el momento, esto porque se espera una cuantificación real de cuanta coca es necesaria para el consumo y la nacionalización.
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