Naciones Unidas.- El fundador de Wikileaks, el australiano Julian Assange, pidió ayer a la Administración de Barack Obama que ponga fin a la persecución de la que es objeto desde hace meses y exigió garantías a los Gobiernos de Reino Unido y Suecia de que no será extraditado a Estados Unidos.
“Coincidimos en los discursos que hablan de alcanzar la paz, pero el tiempo de las palabras se ha terminado. Ha llegado la hora de que Estados Unidos cese la persecución a Wikileaks, a nuestra gente y a nuestras fuentes”, afirmó Assange durante un acto organizado en la sede de Naciones Unidas en el marco de la Asamblea General, informó Efe.
El australiano, que intervino a través de videoconferencia desde la Embajada de Ecuador en Londres donde está refugiado desde hace tres meses, afirmó que hasta la fecha ni Reino Unido ni Suecia han dado garantías a las autoridades ecuatorianas de que no será extraditado a Estados Unidos.
Durante la conferencia, en la que también estuvo presente el ministro de Asuntos Exteriores ecuatoriano, Ricardo Patiño, Assange pidió “no desestimar” el alcance de la investigación lanzada por Washington contra Wikileaks y dijo en concreto que el FBI cuenta con “más de 42.000 páginas” relacionadas con sus actividades.