Gil ratifica su palabra pese a suspensión de curul



Legisladora cruceña trabajando en su curul titular.

Luego que la Comisión de Ética de la Cámara de Diputados resolvió suspender de su curul a la diputada de Convergencia Nacional (CN), Adriana Gil, por una denuncia sobre supuesto racismo y discriminación contra el presidente Evo Morales al decir que éste fue “desleal” con los pueblos indígenas, el pleno de la Cámara de Diputados comenzó a analizar el caso en sesión reservada para confirmar o negar esta resolución.

La diputada cruceña, sin embargo, ratificó sus cuestionamientos al presidente del Estado y a quienes considera “advenedizos” al denominado “proceso de cambio” y que hoy pretenden suspenderla por tres meses sin goce de haberes.

La aludida reclamó porque el caso no se había tratado hasta las 22:00 de ayer y se discutían otros temas. “Lo hacen para distraer la atención; además no se quiere la presencia de la prensa cuyos miembros están en la calle. Yo pido que estén en la sesión y si pueden transmitan”, dijo la diputada ante la decisión de tratar el caso en sesión reservada según reglamento.

“Podrán tener mi cargo, pero jamás mi conciencia. Representó a una gran parte de la población y me ratifico en todas mis declaraciones. Evo fue desleal con los indígenas y es desleal con la gente que le dio la mano”, destacó la diputada.

Adriana Gil fue aliada de Morales en la campaña presidencial del 2005 e inclusive peleó con los sectores de ultra derecha tratando de abrir espacios para el entonces candidato del MAS, en un territorio que le fue hostil y contrario hasta hace unos años.

“Sufro un acoso permanente y no quiero que este caso se dilate más. Lo único que se pretende es defenestrarme”, dijo la diputada que quedaría suspendida por tres meses por la Comisión de Ética.

 
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