Movilización de maestros rurales generó molestia en la ciudadanía

Un contingente policial dispersó ayer el bloqueo protagonizado por centenares de maestros rurales que llegaron a la ciudad de La Paz, exigiendo varias demandas, como la nivelación de salarios y los exámenes de ascensos, empero el ministro de Educación, Roberto Aguilar, descalificó la protesta.

Los maestros rurales se declararon en estado de emergencia, con el paro de 24 horas, suspendiendo de esta manera las actividades educativas en todos los centros educativos de las áreas rurales del departamento de La Paz.

Centenares de educadores rurales bloquearon la avenida de las Naciones Unidas, a la altura de la zona La Portada, donde generaron caos y paralizaron la circulación vehicular de la ruta La Paz-El Ato, por lo que miles de pasajeros se vieron perjudicados en sus actividades, entre ellos comerciantes, estudiantes y personas que tienen sus fuentes de trabajo en la ciudad Sede de Gobierno.

Ante este hecho, efectivos policiales llegaron hasta ese lugar donde se vieron obligados a usar gases lacrimógenos para dispersar los bloqueos; además procedió a lanzar chorros de agua de los carros Neptuno para dispersar los puntos de bloqueo en el sector.

El viceministro de Régimen Interior, Jorge Pérez, informó que los efectivos policiales se vieron en la necesidad de recurrir al uso de la fuerza para despejar los puntos de bloqueo en la Autopista, ante esta acción los maestros respondieron con piedras a los uniformados y se detuvo a tres agresores.

“La Policía está obligada a evitar el corte de vías y lamentablemente ellos han utilizado dinamita, piedras y ladrillos; miren la cantidad de piedras que han utilizado (mostró). La Policía tiene que garantizar el libre tráfico”, indicó la autoridad gubernamental.

El ejecutivo de la Federación de Maestros Rurales de La Paz, Efraín Ajllahuanca, dijo que los maestros piden una jubilación, con el cien por ciento de haberes, igual que los militares, la nivelación de 108 horas de trabajo, la abrogación del Decreto Supremo 1302, la entrega de computadoras portátiles que les prometió el Ministerio de Educación, y la retroactividad del ascenso de categoría.

“Estamos peleando por las horas de trabajo, el magisterio rural trabaja entre 120 y 140 horas, tiempo completo, entonces el convenio que fue firmado anteriormente, establece que deben pagarnos horas históricas, mismas que debe el Gobierno, hay un convenio que dice que nos deben pagar 108 horas para todo el magisterio rural, pero no se cumple”, dijo.

El ministro de Educación, Roberto Aguilar, se pronunció inmediatamente, descalificando la movilización de los maestros, ya que todos los puntos de su pliego petitorio fueron atendidos satisfactoriamente.

“Todos los puntos que están siendo planteados como motivo del paro, han sido respondidos de manera positiva hace varios días por el Ministerio de Educación y en muchos de los cuales existen un acta firmada por la dirigencia de la Confederación”, afirmó Aguilar.

En criterio de la autoridad, la movilización de este sector tiene afanes sindicales, debido a la próxima elección de la dirigencia en la Confederación de Maestros Rurales de Bolivia, empero, lamentó el perjuicio que se ocasionan estas actitudes a la niñez y juventud del área rural.