Gremiales estaban en huelga de hambre en la puerta de la Alcaldía, exigiendo la destitución del director de Defensa del Consumidor.
Oruro, (EL DIARIO).- Oruro normalizó sus actividades ayer, después de dos días del bloqueo de los caminos de acceso a esta ciudad, pero surgen otras movilizaciones de las juntas vecinales que forman parte del Movimiento Sin Techo, rechazando la aprobación de los planos de las urbanizaciones que legalmente compraron los terrenos de la Sucesión Urquidi, en la zona Sureste y los gremiales que reclaman la renuncia del director de Defensa al Consumidor.
Las puertas de la Alcaldía Municipal de Oruro permanecían ayer cerradas. Los gremiales no permitieron el ingreso de los funcionarios ni autoridades municipales, hasta lograr la destitución del director de Defensa al Consumidor, Angel Valencia.
Las movilizaciones fueron respaldadas por la Federación Departamental de Gremiales, dirigida por Marcelino Arancibia.
El dirigente explicó ayer que existen denuncias sobre “casos de corrupción”, en los que presuntamente estaría involucrado Valencia. La Municipalidad pidió una denuncia por escrito, para evaluar los hechos y si hay necesidad de formar una comisión de abogados para efectuar el proceso correspondiente contra la autoridad.
Arancibia presentó por escrito las denuncias y, por disposición de la alcaldesa, Rossío Pimentel, el funcionario involucrado fue suspendido de sus funciones, para ser sometido a proceso administrativo. Cerca del mediodía, la huelga de hambre instalada en la puerta de la Municipalidad, fue levantada.
El afectado, Angel Valencia, negó cualquier sindicación de parte de los comerciantes. Dijo que la actitud de los gremiales se debe a “una actuación correcta en el control de los mercados de la ciudad, que no les ha gustado a los dirigentes y se han inventado actos de corrupción que no existen”.
“De todas maneras, estoy dispuesto a someterme al proceso, para demostrar mi inocencia, pero al mismo tiempo, exijo pruebas de esas denuncias”, enfatizó.
VECINOS EN HUELGA
Por su parte, otro grupo de vecinos que forman parte del Movimiento Sin Techo iniciaron ayer una huelga de hambre en el kiosco de la Plaza 10 de Febrero, rechazando la aprobación legal de los planos de las urbanizaciones de los barrios de la zona Sureste de la ciudad, porque supuestamente “los terrenos no son de la Sucesión Urquidi”.
La huelga, sin embargo, no tiene gran participación, como en anteriores ocasiones, donde habían miles de personas que seguían las instrucciones de su líder, Luis Alegría, presidente del Movimiento Sin Techo, que desde hace seis años, inició la usurpación de terrenos para la construcción de viviendas, en forma ilegal.
El presidente del Comité de Defensa de las Juntas Vecinales de la zona Sureste, Carlos Espinar, dijo que, por lo visto, “los que se oponen a la aprobación de los planos, no quieren someterse a la legalidad y quieren seguir ocupando terrenos que no les pertenece y tampoco quieren pagar el costo del terreno”.
Dijo que, mediante una sentencia del Tribunal Supremo Agroambiental, con sede en Sucre, “ha confirmado el derecho propietario de los terrenos de la Sucesión Urquidi y no puede haber duda de su legalidad, porque de lo contrario, se hubiese efectuado la anulación de sus títulos de propiedad, tal como pedían los comunarios de Sora”.
Mientras tanto, el secretario general de la Alcaldía, Jorge Ustárez, explicó que el trámite para la revisión de los planos de las urbanizaciones de Oruro se ha iniciado, en base al nuevo instrumento jurídico, denominado Decreto Municipal y a un reglamento que permitirá resolver los problemas de los asentamientos humanos consolidados de extensos barrios de la ciudad.
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