Ganadores pese a la presión del Duce

Italia fue la ganadora del II Campeonato Mundial de Fútbol que organizó en 1934, pese a la gran presión política que ejerció sobre el equipo el Mandatario del país, Benito Mussolini, el Duce.

Fue la única vez que la presión política se hizo sentir en el campo de juego, al punto que los jugadores estaban obligados a saludar con el brazo extendido, la característica del partido gobernante, el facista.

A pesar de ese accionar político, el entrenador, Vittorio Pozzo, armó un equipo competitivo que buscó, desde el primer cotejo, llegar a la final por ser locales, por tener condiciones y porque era uno de los mejores seleccionados del momento.

Ganador indiscutible

Los azules se coronaron vencedores de esta Copa jugando un partido más que su rival en la final, Checoslovaquia. A diferencia de lo hecho en Uruguay, los 16 seleccionados participantes no se dividieron en grupos, jugaron los octavos de final.

Eso implicaba que los ganadores clasificaban y los perdedores volvían a casa después de jugar un solo cotejo. Los locales, los italianos, empezaron en gran forma al golear 7-1 a Estados Unidos.

Sin embargo, en cuartos de final empataron con España 1-1 y tuvieron que disputar un partido de desempate, ganándolo 1-0, pero con mucho esfuerzo y logrando la clasificación a semifinales.

Allí venció 1-0 a Australia y luego, en la final, venció 2-1 a Checoslovaquia con la desesperación que provocaba el paso del tiempo, pues perdían 1-0 cuando faltaban 4 minutos para el término reglamentario del partido.

La victoria llegó después de empatar a los 86 minutos y hacer el 2-1 a los 96’, 6 minutos más de adición que dio el árbitro Iván Eklin de Suecia.

LOS DEMÁS

De los 16 participantes, 12 eran de Europa, 1 de África, Egipto, y tres de América, Estados Unidos, goleado por los locales; Brasil, que perdió 3-1 con España y Argentina, derrotada 3-2 por Suecia.

Los europeos mostraron dominio, pues Checoslovaquia fue segundo, Alemania tercero y Austria cuarto. La cantidad de selecciones participantes del viejo mundo fue la tónica que gestó a partir del ’34, debido a su gran cantidad de miembros.

El sistema de disputa adoptado por la FIFA, jugar directamente los octavos de final, nunca más sería empleado, pues los perdedores no tuvieron opción a revancha.

Italia demostró que lo importante era tener un equipo sólido y bien reforzado, pues los jugadores Guaita y Orsi, argentinos de nacimiento y de selección, fueron naturalizados italianos y fueron claves para la obtención del título.

Lo hecho por los italianos y sobre todo por Pozzo, tendría un segundo capítulo cuatro años más tarde, en 1938, cuando la historia lo pondría al técnico en lo más alto de la consideración mundial. Pero, esa es otra historia.

Argentina decepcionó a sus simpatizantes pese a prometer una buena campaña, luego de ser el subcampeón vigente. Perdió con Suecia 3-2 y la crítica fue por su mala actuación. En la semana anterior al debut, jugó un solo partido, frente a la tripulación del barco que los trasladó a Europa. Todo un papelón.

La selección uruguaya se negó a participar debido a que los italianos no lo habían hecho cuatro años antes en su tierra, durante el boicot de gran parte de los países europeos, aunque los dirigentes de Uruguay hicieron trascender : “No iremos en rechazo al régimen facista italiano y a la utilización política que se hará del evento”.

La F.I.F.A., permitió que la selección local contara con cuatro jugadores argentinos (Monti, Guaita, Atilio Demaria y Orsi) y un brasileño (Guarisi). Además fue el primer mundial donde flameó durante todo el certamen la bandera oficial de la F.I.F.A.

Ante la negativa de los uruguayos, los pobres seleccionados presentados por Argentina y Brasil y la permisiva F.I.F.A., la mesa ya estaba tendida para los italianos.

Equipos: 16

Fecha: 27 de mayo al 10 de junio de 1934

Final: 10 de junio e 1934

Partidos: 17

Goles: 70 (promedio de 4.1 por partido)

Asistencia: 408.602 espectadores

Ganador: Italia

Segundo: Checoslovaquia

Tercero: Alemania

Cuarto: Austria

Botín de oro: Angelo Schiavio (ITA)