Animales entrenados por la Felcn trabajan con personas con capacidades diferentes

A diferencia de otras entidades encargadas del entrenamiento de perros policía, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) no sólo destinada a las mascotas a tareas de detección de explosivos, narcotráfico y rescate de personas, sino también a labores sociales mediante el proyecto de “Canuterapia”, mismo que está destinado a menores con capacidades diferentes.

El proyecto social fue inaugurado el 14 de marzo del 2011 con un menor de cuatro años que presentaba un cuadro de autismo, el cual, con la aplicación del proyecto en la gestión del teniente Jorge Mercado y la psicóloga Rayza Tapia y el apoyo de los padres del menor, logró una mejora en su calidad de vida.

“A la fecha se atiende de manera gratuita a alrededor de seis menores con diferentes enfermedades de discapacidad. Los niños llegan al centro y lo primero que les facilitamos es que ellos puedan relacionarse con un can, proceso que está acompañado con un estudio psicológico con la finalidad de poder permitir al menor a mejorar su calidad de vida y abandonar algunas reacciones que puedan generar un daño a ellos como el aislamiento o la agresividad, entre otros”, explicó el Teniente Ariel Luna responsable del centro social.

De acuerdo con Luna, la técnica aplicada por la unidad de canes estaría basada en los requerimientos de la población, quienes no son tomados en cuenta, ante la inexistencia de este tipo de terapias. “Si bien esta técnica no existe en Bolivia, nuestra incursión, hace más de un año, ha sido aceptada y respondida de manera favorable tanto por los padres de familia que confían sus hijos a la terapia, la cual requiere que sea personalizada e intensiva para obtener resultados”, aseveró.

Asimismo, sostuvo que un convenio con el Comité Nacional de la Persona con Discapacidad (Conalpedis) permite la inserción de menores con discapacidad neurológica o mental, donde si bien el tratamiento de la institución policial es gratuito, a pesar del trabajo profesional aplicado en el ámbito de psicología, los padres de familia deben firmar el compromiso de no interrumpir las sesiones planificadas con la finalidad de evaluar los avances identificados en beneficio de la persona atendida.

“Las razas de perros empleada para la Canuterapia, son el labrador y Golden Retriever, de los cuales una en especial llamada Gertrudis, es el perro preferido por los niños, quienes como primer reto deben pronunciar su nombre para desarrollar su terapia, aspecto que representa un gran avance sobre todo en menores que se aíslan en su mundo, como son los autistas”, indicó el teniente Luna.

Por su parte, la psicóloga Rayza Tapia, recuerda que el primer menor tratante registraba autismo, razón por la cual presentaba aislamiento y grados de agresividad, además de tener una mirada perdida. “Lo primero que logró nuestro primer niño, fue pronunciar el nombre del can con el que trabajaba y modificó su conducta agresiva aprendiendo a dar abrazos a todo el personal y otro de los cambios es que el menor dejó de aislarse, fijando la mirada a las personas que dialogaban con él para luego obedecer órdenes”, explicó.