El presidente de la Asociación Nacional de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), Demetrio Pérez, pidió al Estado seguridad jurídica para las tierras evitando todo tipo de avasallamientos, permitir la liberación plena de las exportaciones y el uso de tecnologías para productos genéticamente modificados.
De esta manera se producirían más alimentos que garanticen la seguridad alimentaria de Bolivia y se podrá ampliar la frontera agrícola. Añadió que el Estado debe aprobar leyes de apoyo y no en perjuicio del sector agrícola generador de empleo, para así pasar de una economía extractiva de materia prima sin valor agregado a una economía eminentemente productiva.
“Hay que modificar varios artículos de la Ley de la Madre Tierra y me parece que los que la han elaborado no conocen la realidad del país, el no permitir el uso de las tecnologías para alimentos genéticamente modificados, nos induce, como país, a ser consumidores de los productos de otros lugares, requerimos que las normativas nos apoyen”, reclamó.
Por su parte, Susano Terceros, presidente de la filial de Anapo en San Julián, dijo que los productores están preocupados porque pese a los buenos rendimientos, no existe apoyo en el tema de comercialización de productos agrícolas.