Oruro, (EL DIARIO).- El Sexto Congreso Ordinario del Movimiento al Socialismo (MAS), regional Oruro, no permitirá el ingreso de “infiltrados” y “divisionistas”, que por su lado organizaron ayer un ampliado departamental, para tratar de mantener su hegemonía, con el objetivo de definir cambios en la administración pública.
“Nuestro congreso tiene más jerarquía que un simple ampliado del otro grupo. Nosotros tenemos bases en diferentes sectores populares del departamento de Oruro y no estamos buscando cargos, de ninguna naturaleza”, afirmó Ramiro Figueredo, declarado jefe departamental del MAS.
“Los conflictos internos de la dirección del departamento deben servir para que en el congreso elijamos a compañeros sin intereses personales, pero sí a hermanos que coadyuven y estén comprometidos con el proceso de cambio y la revolución democrática y cultural”, explicó el dirigente.
Por eso, consideró que no se debe permitir “infiltrados, porque luego crean divisiones y conflictos sociales al interior del instrumento político”. De esa forma, se refirió a los grupos de juntas vecinales que se organizaron para tomar el mando departamental, entre los que se encuentran Andrés Beltrán y José Flores, que ayer realizaron un ampliado para buscar su ratificación como jefe y subjefe del MAS en Oruro.
La división se profundizó entre los dos grupos. Sin embargo, Figueredo dijo que legítimamente el congreso es el que elige un comando departamental y no un grupo de personas que se reúne en nombre de los diferentes sectores sociales.
Según Figueredo, se efectuará una marcha por las calles de Oruro y después se formará la comisión de poderes, para empezar las deliberaciones, entre los que realmente son representantes de las organizaciones sociales.
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