El Cairo.- Las esperanzas de reducir la violencia en Siria acabaron por desvanecerse en el tercer día de tregua decretada durante la Fiesta del Sacrificio y que ayer estuvo marcado por nuevos choques y bombardeos en las afueras de Damasco y otras zonas del país.
Desde primera hora de la mañana, los alrededores de la capital siria se convirtieron en escenario de fuertes enfrentamientos entre las tropas leales al régimen del presidente sirio, Bachar Al Asad, y los rebeldes, informó Efe.
Ambas partes se habían comprometido en principio a respetar el alto el fuego durante cuatro días, concretamente desde el viernes pasado hasta hoy, pero pronto empezaron a acusarse mutuamente de violar los términos de la tregua y siguieron combatiendo.
En ese sentido, ayer se registraron choques en la localidad de Hayar Asuad y bombardeos en las de Haran al Auamid y Duma, en la periferia de Damasco.